La compañía estadounidense mantenía dos filiales en Ecuador: EDC y Machala Power. La primera se dedicaba a la explotación de gas en el Golfo de Guayaquil, el cual servía para la generación de electricidad a cargo de la segunda.
Producto del cambio de contratos petroleros en el país, EDC prefirió dejar sus operaciones en Ecuador y comenzó una negociación para que el Estado le reconozca las inversiones realizadas. Pero el ministro de Recursos No Renovables, Wilson Pástor, señaló que canceló USD 80 millones a las dos filiales de Noble Energy.