Un encargado de la seguridad presidencial pidió a la mujer que mostrara el cartel que tenía en las manos. Beatriz Gallegos abrió la cartulina y, al leer el contenido, el guardia lo confiscó.
Más tarde ella contó que había una leyenda alusiva a la falta de obras en la comunidad Mirabad, ubicada en el sector de Sarapullo. Ahí se construye parte del proyecto hidroeléctrico Toachi-Pilatón. “Cuando comenzaron los trabajos nos ofrecieron un centro médico, adecuar la escuela y seguridad. Pero no se ha cumplido”, dijo Gallegos, vecina de Mirabad.
Ayer, ella quería que el presidente de la República, Rafael Correa, conociera los pormenores. Él visitó el proyecto para constatar los avances. Pero la única forma de entrar al sitio donde estaba el Mandatario era sin el cartel.
Gallegos, quien llegó con 30 personas de la zona, tuvo que poner en práctica un plan B.
Otro compañero camufló un oficio que pensaban entregar al Presidente, pero solo lograron ser atendidos por un asesor.
Mauricio Toapanta espera que el documento llegue. Él es profesor de la escuela Mirabad. Ahí estudian 36 niños. “Tenemos un presupuesto anual de USD 299 y solo en servicios básicos se nos va USD 100”.
Hace falta computadoras, pues solo tienen dos, que fueron donadas por la Prefectura de Pichincha. Además les urge un cerramiento para las aulas. “Cualquier persona puede entrar y llevarse lo poco que tenemos. Y hemos tenido casos de personas que ofrecen caramelos a los niños para llevarlos. Ellos saben que no deben aceptar y por eso hasta ahora no ha pasado nada”.
El Presiente llegó ayer a esa escuela. Habló con Toapanta y le preguntó si los textos escolares habían llegado. El profesor le dijo que sí, pero no ahondaron en los problemas de la escuela.
El Mandatario visitó la provincia con prisa. Minutos antes, estuvo en Sarapullo, en el sitio donde se construye una represa para la generación eléctrica. Tenía previsto constatar los avances de la obra y eso le llevó 10 minutos. Bajó de un bus, dio una vuelta por el lugar y salió tras una breve explicación de los técnicos. Hay un avance del 19% frente a un 22% que fue programado.
Luego acudió al campamento Las Palmas, en el km 70 de la vía Alóag – Santo Domingo.
Ahí dio un discurso ante un centenar de personas. Dijo que el Toachi-Pilatón es el primer proyecto hidroeléctrico que da hacia el Pacífico. La mayor parte de hidroeléctricas está en la Amazonía. Si ahí no hay lluvia, se produce estiaje. Con el Toachi-Pilatón “nos protegemos mejor ante el estiaje”, porque cuando falta lluvias en la Amazonía, en el Pacífico se registran precipitaciones.
Además, el país quiere dejar de importar energía . “Estamos construyendo ocho hidroeléctricas. En el 2015, el 93% de energía será de origen hidráulico y ya no se quemará combustible”.
Correa no se refirió a las denuncias que ex obreros de la firma china a cargo de las obras civiles hicieron públicas. Según ellos, los hicieron trabajar jornadas de hasta 36 horas, sin registro de horas extras ni todos los equipos de protección. Lorena Pazmiño, directora de Responsabilidad Social de Hidrotoapi (fiscalizadora), afirmó que no hay pruebas de que se haya faltado a sus garantías.
Los asistentes aplaudieron la intervención del Presidente. La mayoría no eran de las comunidades de la zona. Fueron traídos de Alóag. Rocío Gualotuña contó que la junta parroquial contrató un bus. Ella también tenía un cartel en la mano al momento de ingresar al campamento Las Palmas, donde habló el Presidente. Pero no le fue confiscado.
En el afiche se veía la imagen del Presidente con el eslogan: ‘La Revolución Avanza’.
La inversión y avance
El proyecto Toachi- Pilatón tiene un costo USD 500 millones. La mitad del valor de la obra la financia el Banco del IESS.
El proyecto comprende dos represas y una minicentral. Aportará al sistema eléctrico con 254,4 megavatios/hora.
El 6 de septiembre pasado se culminó la construcción del túnel de desvío del río Toachi, para iniciar los trabajos previos de la represa Sarapullo.
La represa más grande se levantará en Alluriquín. Generará 204 megavatios/hora.