Habla mucho y especifica poco. Escucharlo es como asistir a una clase magistral de Economía, con cuadros, cifras, fórmulas y el anuncio (sic) de buenas noticias, que lamentablemente son secretos de Estado. A la hora de responder preguntas específicas, especialmente sobre endeudamiento, la respuesta se repite una y otra vez: “el art. 12 de la Ley Orgánica de Responsabilidad, Estabilización y Transparencia Fiscal me prohíbe entrar en detalles. Hay una sanción de carácter penal”. Y, a veces, entre sonrisas, añade algo de un humor a sus argumentos: “Esta penado con reclusión y no sé jugar vóley ”. Solamente es posible preguntarle una vez al mes, cuando realiza los conversatorios con los medios de comunicación. Antes de eso es imposible, sería más sencillo lograr una entrevista con el ahora famoso pulpo Paúl. Es el ministro de Finanzas, Patricio Rivera, quien conserva bajo siete llaves su Cartera de Estado. El pasado miércoles, en su encuentro de julio con los periodistas, inició con una bienvenida, asegurando que es la oportunidad de dialogar sobre cualquier cosa. “Si quieren entrar en cualquier detalle de la parte fiscal no hay problema, podemos conversar con todo el detalle que ustedes requieran”. Después de 33 minutos de exposición, donde dio a conocer que el país no tiene problemas de liquidez, que las inversiones petroleras van por buen camino, que las recaudaciones tributarias avanzan de lo mejor y que las condiciones del crédito chino por casi USD 1 700 millones para la construcción del Coca-Codo Sinclair son inmejorables, dio paso a un panel de preguntas. Y los cuestionamientos llegaron: ¿cómo está el Presupuesto y cómo está el endeudamiento? La respuesta. “El Presupuesto está perfectamente financiado. Hay buenas noticias sobre el financiamiento, algunas la conocen, otras no puedo dar detalles por el artículo 12 de la Ley. Seguramente, para la siguiente reunión que hagamos les comentaré sobre una de las operaciones que estamos llevando adelante, que seguro estará concluida y podremos conversar sobre todos los detalles”. Y ayer, la Corporación Andina de Fomento (CAF) se le adelantó a dar las buenas noticias: la aprobación de dos créditos, por USD 360 millones para distintas obras en el país (ver página 12). “Señor Ministro, ¿podría detallar a cuánto asciende el déficit fiscal y cuánto del financiamiento es con países y organismos? Respuesta: “Pido mil disculpas, pero no puedo entrar en detalles. La Ley me permite hablar de ingresos y gastos, de variación de depósitos con toda libertad. Pero sobre endeudamiento público estoy limitado por el art. 12. Lo que sí les puedo asegurar es que hay buenas noticias sobre el financiamiento externo. Para la siguiente reunión mensual daré un poco más de detalles”. “¿Y de cuánto será el crecimiento de la economía para este año? El Presidente ha dicho que menor al 6,8% estimado”. Después de una cátedra económica de cómo se calcula el crecimiento del país señaló que “(…) hay un conjunto de buenas noticias que no puedo detallar por el art. 12 de la Ley, pero que nos permite ser bastante optimistas de toda la inyección de recursos que se vendrán para el segundo semestre. Hay que incorporarlos al cálculo del crecimiento estimado para que sea lo más real. Cuando esté concluido el trabajo conjunto con el Banco Central, la Senplades y el Ministerio Coordinador de la Política Económica, les haremos saber la cifra”. La dificultad en obtener respuestas precisas continuó durante todo el encuentro, pero ya ha sido habitual en la forma de transmitir la información. Eso sucedió con la información sobre las negociaciones que mantiene para obtener un nuevo crédito de USD 1 000 millones con China y que sería pagado con petróleo. Rivera lo desmintió en un comunicado, pese a que su colega de la Cartera de Sectores Estratégicos reconoció el mismo día que sí habían diálogos en ese sentido con los chinos. Tampoco dio la cara a tiempo cuando se conoció que el Estado preparaba una emisión de bonos y que el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) iba a adquirir USD 1 550 millones de esos papeles. Solo cuando se supo por los medios de comunicación, dio a conocer “la noticia”, de la mano con el titular del Directorio del IESS, Ramiro González. Últimamente, tampoco se conocen los detalles sobre los acuerdos logrados con Venezuela y solo ha dicho, como siempre, que en su debido momento lo dará a conocer públicamente. Rivera, el ministro más joven del Gabinete, ha estado casi una década en los pasillos de Finanzas. Y su perfil académico le hizo merecedor para ocupar esta Cartera de Estado. Se la conoce de memoria. Por ello, pese a su silencio, ha logrado concretar, por ejemplo, el préstamo de China para la construcción de la Central del Coca-Codo Sinclair. De hecho, adelantó que la próxima semana se realizará el primer desembolso de USD 50 millones, de lo que implica la contrapartida presupuestaria que Ecuador debe cancelar (de un total de USD 300 millones) para el inicio de la obra.Sin embargo, cuando debiera explicar las cosas claras, tiene una autocrítica -que a la vez le ha llegado del Mandatario-: “Perdón que seamos tan tecnócratas, El Presidente dice que a los economistas nos encanta hablar en chino”. ¿Para cuándo estará lista la emisión de USD 400 millones más en bonos del Estado?Respuesta: “Les juro que si el art. 12 me dejara comentarles sería maravilloso, pero no lo es. No les puedo contar los detalles”. ¿Y el desempleo ha subido? Respuesta: “Ese es un tema que tanto las autoridades del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) como de la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades), como la cabezas del proceso, serán quienes podrán darles mayor detalle sobre el tema”. En definitiva, sea porque el citado art. 12 no le permite o porque no es un tema que le atañe a su Ministerio, el ministro Rivera evade contestar preguntas que son de interés público y que normalmente debieran ser respondidas por quien dirige una de las carteras más delicadas. Al término del encuentro del pasado miércoles, reconoció que su Ministerio no reporta mucha información fresca porque sale una vez al mes. “Voy a tratar de que haya más boletines, con más detalles. Si hay información muy trascendente haremos una reunión puntual con todos ustedes, de unos 15 minutos, preguntamos algo y salimos rápido”. También ofreció entregar una serie de documentos y “estudios bonitos” sobre el manejo fiscal y cómo ha ido variando la ejecución presupuestaria a lo largo de la historia del Ecuador.