La política de aumentar los ingresos a los más pobres, sea a través de subsidios, gasto social o revisiones salariales, ha ocasionado que la pobreza en el país baje.
Ecuador se ubica entre los cinco países de América Latina donde más cayó la pobreza entre el 2009 y el 2010, según datos de la Cepal. Se trata de un resultado positivo, pero hay que verlo en contexto.
Luego de un año de crisis, como fue el 2009, es natural que los países mejoren sus indicadores, como en efecto ocurrió con la mayoría de países de la región, y más en aquellos que han contado con altos ingresos provenientes de la venta de materias primas, como es el caso de Ecuador.
Pese al aumento de ingresos, Ecuador está entre los países que menos gastan en sus habitantes. El Gobierno reconoce que ese gasto es bajo (menos de USD 300), pero se ha duplicado en los últimos años. Y resalta que con pocos recursos ha logrado que el país esté entre los que más ha reducido la pobreza.
Lo anterior es un signo de eficiencia para el Régimen, aunque hay que recordar que gobiernos anteriores han logrado bajar la pobreza más rápido y con la mitad de los recursos del actual Gobierno.
La reducción de la pobreza, sin embargo, no ha ido en paralelo con la disminución de la desigualdad. Según los mismos datos de la Cepal, en el período 2002-2008, el país logró reducir las brechas entre ricos y pobres, como lo hicieron 14 países de la región.
Sin embargo, en el período 2008-2010 Ecuador está, con Paraguay y República Dominicana, entre los países que aumentaron la desigualdad.