En los últimos tres años un promedio de 23 767 personas presentaron su trámite de jubilación, según información del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
Al dar este paso los ex trabajadores no solo deben pensar en el merecido descanso que obtendrán, sino en los procesos para reorganizar su vida tras la terminación de la relación laboral.
Al no tener un sueldo fijo tendrán que ajustar el dinero que reciben como pensión para los gastos mensuales, hallar mecanismos para recibir ingresos extra de ser el caso, buscar actividades que les permitan estar laboralmente activos, etc.
Según Ceese Van Der Lee, gerente general de Vázquez Kennedy & Partners, empresa que se encarga de apoyo a personas naturales o jurídicas en procesos de desvinculación laboral, las personas tienen al menos 20 años, tras su jubilación, para mantenerse activos dentro de la sociedad.
Ello debido a que en la mayoría de los casos las personas se jubilan entre los 55 y los 60 años. Entre ellos está Arturo Murillo, quien optó por el retiro a los 56 años, al contar con más de 40 aportaciones en el Seguro Social.
Actualmente, él es presidente de la Asociación de Jubilados Pablo Antonio Falconí y al mes tiene ingresos por USD 650, que le permiten sustentarse “tranquilamente”, según comenta.
Sin embargo, la pensión que reciben otros jubilados no les es suficiente, principalmente por los gastos médicos que deben hacer. El INEC revela que en los últimos cuatro meses el 69% de los 1 229 089 adultos mayores del país han necesitado atención médica en un período de cuatro meses (dato del año 2009).
“Las necesidades del jubilado son fuertes, principalmente porque no se tiene un sueldo fijo. Por esta razón es recomendable que durante su etapa laboral la persona vaya generando un fondo de ahorro que le permita sustentarse al momento de su retiro”, señala el experto en finanzas personales Hugo Villacrés.
En el caso que la persona cuente con ahorros y quiera que ese dinero rinda frutos puede invertir en bancos, bolsa de valores, etc. Los datos de casas de valores como Santa Fe, Casa Real y Albión indican que los jubilados que invierten cuentan con montos de aproximadamente USD 5 000.
También es posible buscar un nuevo empleo, pero en el país hay pocas oportunidades para los adultos mayores.
El Estado impone reglas para los trabajadores que deseen optar por la jubilación
Los trabajadores afiliados al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) pueden jubilarse cuando tengan 60 años de edad y 360 o más aportaciones, que equivalen a 30 años de servicio.
Para optar por este beneficio las personas tienen que encontrarse cesantes (haber terminado la relación laboral), no tener mora con el IEES (ni como empleador ni como trabajador), tener cancelados los aportes hasta el mes en el que dejó el trabajo y contar con el aviso de salida por parte del empleador.
La persona que desee jubilarse debe tener una cuenta bancaria activa. Como parte del trámite de retiro la persona debe registrarla en la web del IESS (www.iess.gob.ec), en el link historia laboral .
Como tercer paso la persona debe ingresar a la web del IESS, ir al link “solicitud de pensiones”, ingresar su número de cédula, escoger la opción jubilación por vejez, poner su clave y crear la solicitud.
El artículo 229 de la Ley de Seguridad Social señala que la pensión de una persona que se jubila corresponde al 75% del promedio de los cinco años de mejor sueldo (ver ejemplo).
Si la persona tiene menos de 60 años y 480 aportaciones o más, correspondiente a 40 años de aportes o más , puede jubilarse. El cálculo de la pensión es igual al de un trabajador con 60 años de servicio y 30 de aportes.
Quien ha laborado 25 años o más en una firma (de forma continua o interrumpida) tienen derecho a la jubilación patronal. Para el cálculo la ley establece una fórmula (ver en la web).
Es recomendable que partir del décimo año de servicio la empresa comience a aprovisionar fondos para la jubilación patronal del empleado.
Para realizar el presupuesto mensual debe considerar los siguientes aspectos.
Tome en cuenta sus ingresos ordinarios y extraordinarios. Entre los primeros están la pensión jubilar, el ingreso mensual de un negocio y el arriendo de un inmueble. En los segundos: intereses por inversiones, apoyo de familiares, etc.
Luego defina los gastos ordinarios, que se refieren a alimentación, vivienda, vestido y salud. Y los egresos extraordinarios están vinculados a la recreación, que es clave para un jubilado. No olvide, los ingresos ordinarios deben cubrir los gastos ordinarios.
Los financistas recomiendan destinar un 40% al pago de alimentos, servicios básicos y arriendo, 20% a recreación, 20% a salud, un 10% a un fondo de ahorro y el otro 10% a viajes, compra de bienes, imprevistos, etc.
Establezca un fondo para gastos por enfermedades graves que se presenten en el futuro.
Antes de jubilarse es importante que ahorre más, para tener un colchón de seguridad o montar un negocio propio. Es más arriesgado usar el monto de la jubilación para instalar un negocio, ya que podría fracasar y perder todo su capital.
Guarde parte del dinero para invertirlo y así obtener un interés fijo que le permita tener un ingreso extra mensualmente.
Antes de jubilarse realice un listado de las deudas: monto, institución en la que adeuda y el plazo para cancelar esta obligación. Establezca un plan de pago para las deudas pendientes. Esto le permitirá bajar la presión sobre su presupuesto y estar más tranquilo.
Es ideal que antes de jubilarse haya pagado toda deuda de activos como casa, carros, etc. Eso le permitirá mantener un buen estilo de vida en su jubilación.
Dónde puede invertir su dinero
Se recomienda que las personas jubiladas no utilicen su liquidación en compra de electrodomésticos, vehículos, etc., ya que sus ingresos mensuales se verán restringidos y lo importante es obtener dinero extra. Es preferible invertir su dinero en un micronegocio, bolsa de valores, bienes raíces, entre otras.
Un jubilado no puede darse el lujo de perder su capital, pues ya no tendrá una nueva liquidación en el futuro. Incursione en valores que rindan una tasa de interés previsible, de alta seguridad y por tanto de emisores de reconocida solvencia y credibilidad.
Es recomendable invertir el dinero en títulos de renta fija o en papeles de bajo riesgo. Pregunte qué opciones hay y prefiera aquellos que tengan calificación AA o más. Estos títulos son valores de deuda de una empresa recuperables en corto, mediano o largo plazo que cuentan con una tasa de interés fija.
Además puede invertir su dinero en bancos. El Pichincha ofrece un producto denominado “Arma dólar” o “Arma plazo”. Usted puede invertir desde USD 500 y obtener un pago periódico ya sea mensual, trimestral o semestral. Defina si necesita contar con ingresos fijos cada mes, cada trimestre o semestre.
Si quiere asumir un mayor riesgo puede comprar acciones de empresas, pero eso no le garantizará un ingreso permanente, pues la rentabilidad dependerá de qué tan bien le fue a la empresa durante el año.
El jubilado sí puede continuar activo
Las opciones
Los departamentos de recursos humanos pueden desarrollar planes de ‘outplacement ‘para sus empleados. Este concepto implica técnicas para reorientar a quien se jubila luego de terminar la relación laboral con su empleador.
Empresas expertas en otros procesos recomiendan al jubilado seguir activos laboralmente a través de cuatro mecanismos: comprar una franquicia, comprar y administrar un negocio en marcha, desarrollar un emprendimiento u ofrecer consultorías.
La Asociación de Gestión Humana del Ecuador recomienda que las empresas brinden capacitación al empleado en montaje de emprendimientos tres años antes de que se jubile.
Los jubilados pueden mantenerse activos a través de la actividad docente, participación social, etc.
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