En la Universidad Católica de Ibarra se instaló una planta de biodiésel que producirá anualmente 500 toneladas de combustible. El técnico Leonel Pironi instaló los equipos. Antes de la inauguración, que se realizó el jueves último, revisó la maquinaria. La intención es obtener biocombustibles, utilizando plantas de cuyo fruto se extraen aceites comestibles o industriales. Las oleaginosas que se puede usar son el sésamo, colza, higuerilla, nuez, girasol, palma, copra, olivo, soja, lino, entre otras. Hace tres años se creó el Centro Iberoamericano de Investigación y Transferencia de Tecnología en Oleaginosas, en coordinación con la Escuela de Ciencias Agrícolas y Ambientales de la Universidad Católica de Ibarra y la Universidad Politécnica de Madrid. La Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología apoyó el plan. La Agencia Española de Cooperación Internacional entregó 80 500 euros.Además, los investigadores universitarios intercambiaron material genético de higuerilla y chía del Ecuador por girasol y colza de España. El girasol se adaptó bien en la granja experimental de la Universidad Católica.“También conseguimos buenos resultados con la chía, jatropha (piñón) e higuerilla”, señaló Edmundo Recalde, uno de los responsables del proyecto. Se implementó un laboratorio de microbiología y se instalaron cinco estaciones agroclimáticas automatizadas en Imbabura para conocer los mejores sitios para sembrar oleaginosas. La inversión fue de 100 000 euros.Las estaciones agroclimáticas funcionan en la Universidad Católica, el Ingenio Azucarero del Valle y en la Casa del Agua en Cotacachi. Los equipos se usan para precisar el comportamiento del clima en tiempo real, la dirección y velocidad del viento, precipitaciones y la presión atmosférica. José María Durán, profesor de la Universidad Politécnica de Madrid, indicó que luego de instalar la planta, el siguiente paso será incentivar a las comunidades afroecuatorianas e indígenas de Imbabura para que siembren oleaginosas. “El futuro sería prometedor”. Según Durán, hasta el 2020 la Unión Europea se comprometió a sustituir el 20% del consumo de combustibles fósiles por biocombustibles. “Latinoamérica tiene un gran potencial para atender la necesidad europea”. Este año, la Agencia Española de Cooperación Internacional asignará 126 705 euros para visitar a las comunidades y explicar el funcionamiento de la planta. Los equipos instalados en la universidad, en el sector La Victoria, utilizan prensas de aceite a tornillo, un reactor de biodiésel, un clarificador y un filtrado. Según Pironi, el biodiésel que producirá es igual, en consumo y potencia, al diésel de petróleo que se vende en las gasolineras.Al acto asistieron las autoridades de la universidad y los investigadores españoles que apoyaron esta iniciativa que se desarrolla desde el 2007.