El plan de reconversión laboral para los ex trabajadores de las salas de juego cerradas generó críticas por parte de sus ‘beneficiarios’.
El desarrollo de emprendimientos (con entrega de préstamos para la puesta en marcha de negocios), la reinserción en nuevas actividades productivas (principalmente comercio y turismo) y la capacitación en diferentes áreas fueron los tres pilares de la propuesta gubernamental, que se presentó ayer en el coliseo del Ministerio de Deportes.
Para Miguel Mora, capacitador de la empresa Viña Carolina, propietaria de salas de juego en las que laboraban 320 personas, esto no es suficiente.
“Esto es una burla, una falta de respeto. No nos dan una opción laboral concreta y, además, creen que somos trabajadores sin formación”, señaló. Mientras que una ex empleada, que no quiso decir su nombre, dijo que muchas de las personas que se quedaron sin trabajo son madres solteras, jefas de hogar, que necesitan de un sueldo urgentemente.
Precisamente, en la hoja de registro de los asistentes se daba la opción a los ex empleados a que accedan a talleres de atención en bares, seguridad y vigilancia.
Este proceso fue parte del segundo registro de los ex empleados, ya que el primero se hizo a la entrada del coliseo del Ministerio de Deportes. Aproximadamente 80 de las 1000 personas que se esperaba llegaran al lugar fueron ayer a la presentación.
Mientras en Manta, donde también se hizo el proceso, se calculaba que llegarían 250. Para hoy en Guayaquil se prevé que lleguen 1500 y en Machala 150.
Ellos son parte de las 3583 personas que el Ministerio de Relaciones Laborales tiene registradas como empleadas de negocios de juegos de azar legales (32 casinos) e ilegales (121 salas de juego, que se prevé estén cerrados en su totalidad hasta mañana) en todo el Ecuador.
A esta cifra se llegó tras un levantamiento de datos de los empleados de casinos y salas de juego, que se inició en marzo pasado y terminaría en octubre. “La gente podrá acceder también a ruedas de negocios. La primera se hará el 7 de septiembre en Ambato”, dijo Álvaro Jijón, director de reconversión laboral del Ministerio de Relaciones Laborales.