La importación de procesadores de datos digitales creció 10,8% este año. Hasta septiembre pasado, las compras de impresoras, lectores magnéticos, registradores de información y otros llegaron a USD 231,9 millones.
Pero para el 2012, las empresas relacionadas al negocio esperan sobrepasar ese volumen de ventas, según dieron a conocer en la IV Feria Tecnológica Uniscan, realizada en Guayaquil.
Allí, Héctor Redrobán, gerente de Uniscan, destacó que las compañías en Ecuador ahora solicitan productos que ahorren energía y protejan el medioambiente.
Es así como Star Micronics, marca japonesa, entró al país con la primera impresora Green, fabricada con materiales reciclados y libres de hidrógeno.
Su característica más destacada es que no cuenta con un botón de encendido ni apagado, se maneja con un servidor que administra el uso de la energía solo en el momento de usarla, explicó Hiroya Mochizuki, presidente de Star Micronics en América.
Esta empresa hizo un pedido por USD 500 000 en impresoras, incluidas las ecológicas, para iniciar el próximo año.
Con la asistencia de empresarios interesados en dichas tecnologías, el encuentro se orientó a presentar los recientes adelantos. A la feria, realizada en el Hotel Hilton Colón, acudieron más de 100 potenciales compradores corporativos.
En la exhibición también participaron Motorola Ecuador, Honeywell, Zebra Technologies y Logic Controls. Las dos primeras mencionadas tienen el 40% de participación de mercado en venta de lectores.
Juan Enrique Guzmán, representante en Ecuador de Moto-rola, presentó máquinas de facturación que capturan datos a través de la identificación por radiofrecuencia.
Es decir, ya no es necesario tener una tarjeta para pasarla por lectores físicos de contacto, sino que ahora se puede usar una tarjeta que transmite la información a través de una antena.
También detalló las características de los lectores de códigos de barra, que tienen mayor demanda entre empresas de seguridad y supermercados. “Nuestros equipos compiten por calidad y velocidad de lectura”, sostuvo.
En la feria también se ofrecían soluciones tecnológicas.
Luis Carrillo, jefe de compras de una firma con sede en Loja, llegó al lugar para cotizar una docena de pequeñas máquinas facturadoras de alta tecnología.
“No siempre se busca lo más barato, es cuestión de analizar el beneficio. Y el ahorro energético es un plus en el momento de decidir pagar más por tal o cual producto”, sostuvo.
Redrobán calificó la feria como exitosa, sobre todo por el interés de empresas medianas y pequeñas para ser más competitivas, en base a la adaptación de nuevas tecnologías.
Esta es la cuarta edición de la feria, y la segunda realizada en el Puerto Principal.