Ecuador quiere subir hasta el 90% su participación en la renta petrolera de algunos de los nuevos contratos de prestación de servicios, que negociará con las firmas que operan en el país a partir del 23 de agosto, dijo ayer el ministro de Recursos no Renovables, Wilson Pástor.
El socio más pequeño de la OPEP impulsa desde hace dos años un proceso para modificar sus contratos de participación, que convertirá en meras operadoras de los campos a las firmas, que deberán ceder toda su producción al Estado a cambio del pago de una tarifa por barril extraído.
“De eso (de la renta petrolera) el Estado tiene ahora el 65% en promedio y lo vamos a subir en algunos casos hasta el 90%”, dijo a periodistas el ministro Pástor.
El funcionario, además, confirmó que los modelos de los acuerdos de prestación de servicios fueron entregados ayer a las compañías, que en la víspera expresaron a través de la asociación que las agrupa su preocupación por una demora en la distribución de los textos de los contratos.
Dos de las firmas que operan en el país, que prefirieron guardar la reserva, confirmaron la recepción del documento, pero no dieron detalles de su contenido.
Con la nueva modalidad contractual el país será el propietario de la totalidad del crudo que se produce en sus campos, asegurándose una mayor participación de los ingresos generados por la extracción del crudo.
La española Repsol-YPF, la brasileña Petrobras, el consorcio chino Andes Petroleum y la italiana Eni están entre las empresas más grandes que operan en el país.
Repsol será la primera en sentarse a negociar con el Gobierno los acuerdos y la estatal chilena Enap anticipó que aceptará migrar a los nuevos contratos.