Alfredo Uquillas. Economista
Su experiencia. Hizo una investigación que se plasmó en el documento “Diagnóstico y análisis de los casinos en Ecuador”. Ha manejado temas de proyectos en entidades como el BID.
¿Qué consecuencias traerá el cierre de los casinos?
Lo más fuerte es que alrededor de 2 000 trabajadores directos y 6 000 indirectos se perdieron. Las personas que laboraban allí eran especializadas en ese tema.
¿A qué negocios indirectos afectará este cierre?
Los centros de entretenimiento de este tipo involucraban al sector de la construcción, de infraestructura básica, al de equipamiento urbano y al prestador de servicios. Para el sector turístico el cierre será un problema que tendrá que tomar en consideración.
¿Por qué razón?
Ecuador pierde competitividad en materia de turismo: ocupa el decimoquinto lugar en captación de ingresos y sus expectativas de mejorar esa ubicación solo crecerán en la medida en que pueda diseñar y ejecutar las políticas públicas necesarias para dar un valor agregado a su oferta turística.
Y, ahora que los casinos, como parte de la oferta turística legal, desaparecieron de los hoteles, ¿adónde irán? ¿Podrían crearse sitios de este tipo clandestinos?
Sin ley o con ley habrá casinos. Realicé una investigación sobre este sector en el Ecuador y descubrí al menos unos 50 centros que operaban clandestinamente.
¿Los ecuatorianos tienen debilidad por el juego?
A la gente le gusta el juego. Este es parte natural de la especie humana y animal. Todos jugamos, apostamos, ganamos o perdemos, y eso no se puede eliminar. Siempre habrá alguien, en el mundo, que monte un negocio y en la parte trasera adecúe un casino y/o sala de juegos y gente que esté interesada en estos servicios.
¿La eliminación de casinos y salas de juego llevará a la desaparición de la ludopatía en el territorio ecuatoriano?
A través de mi investigación determiné que no había problemas de ludopatía. Apenas entre el 1 y el 5% eran jugadores compulsivos o patológicos. La mayoría, el 95% de la gente jugaba sanamente.
¿El juego patológico conlleva a otros conflictos sociales?
Este tipo de problemas con el juego tienen mucho en común con otros tipos de adicciones. En zonas donde no hay un clara regulación legal de los juegos de azar se ha producido un incremento de la criminalidad, hecho que sin lugar a dudas también se asocia a otro tipo de variables como el desempleo, bajos niveles educativos y deterioro de la calidad de vida.
¿En el país se generaron graves problemas sociales y pérdidas millonarias por la existencia de negocios dedicados a los juegos de azar?
No. Los casinos y salas de juego de azar en el Ecuador no eran una industria significativa, si no más bien marginal. La débil regulación y control del Estado sobre estos pudo crear en la sociedad descontento y desconfianza.
¿El Estado, precisamente, pierde algo con la medida?
Una de las cuestiones más importantes que está intrínsecamente ligada al hablar sobre casinos son los impuestos. En el país casinos, bingos y salas de juego debían pagar Impuesto a los Consumos Especiales, Impuesto al Valor Agregado e Impuesto a la Renta… no hay datos exactos… Desde el 2002, el sector pudo haber contruibuido conUSD 12 millones (al Fisco).
En Brasil también se cerraron los casinos. ¿Qué efectos ha generado esta medida?
Al menos 800 familias quedaron en el desempleo y los ex empleados dejaron de aportar a la seguridad social. El Estado dejó de recibir por lo menos USD 2 millones anuales por impuestos.
¿Sabe si en ese país ese negocio podría regresar?
En este momento se está pensando en ello. El Congreso de Brasil está discutiendo una ley para regular los casinos. Ese país se dio cuenta de que estaba perdiendo onerosas rentas fiscales y los tan necesarios puestos de trabajo.