El informe de auditoría de la Superintendencia de Bancos y Seguros a Cofiec, a junio de este año, reveló las irregularidades en dos créditos otorgados a la firma Maxigraf.
En el 2010 solicitó ambos préstamos: el uno, el 28 de junio, por USD 600 000 y el otro, el 21 de julio, por USD 250 000.
Estas operaciones se dieron a pesar de que la compañía presentaba pérdidas acumuladas, a ese año, por USD 1,6 millones. Además, su margen operativo y su capital de trabajo eran negativos, la capacidad instalada apenas estaba utilizada en un 5% y no contaba con materia prima.
Sus 244 trabajadores cobraban sus salario pese a que no había mayor producción. Tampoco se aprovechaban las líneas de productos que podía mercadear para mejorar sus resultados.
Por ello, Maxigraf no pudo cumplir con los pagos de sus préstamos, por lo que pidió el refinanciamiento de la deuda.
La administración de Cofiec accedió a hacerlo, pero sin cobrar el 20% de abono, tal como lo exige la ley financiera.
Al 31 de diciembre del 2011, la deuda de Maxigraf con Cofiec llegó a USD 1 085 589, mientras que al 31 de marzo de este año fue de USD 1 025 227. Además, se registró un sobregiro de USD 42 939 al 26 de abril último, según señaló el informe de la autoridad de control bancario.
En esa fecha estaba al frente de Maxigraf, Kerly Loor (no ha sido posible un contacto con ella).
El 11 de octubre, la Superintendencia removió al Directorio de Cofiec, por irregularidades.