BLOG: Lanzando números
¿Mango o piña? Durante tres años, Rafael Chiriboga pospuso la decisión de dejar alguno de estos cultivos para invertir en otro más rentable. Pero el complejo escenario que Ecuador vive con Estados Unidos apuró su resolución: la piña no va más.Así lo decidió hace 15 días, cuando surgió un ‘impasse’ diplomático con el país del norte. Antes de eso, Chiriboga creía que EE.UU. podría renovarle al país las preferencias arancelarias bajo el régimen de la Atpdea (Ley de Preferencias Arancelarias Andinas y Erradicación de Drogas). Ahora, no lo cree.
Con la Atpdea, el mango y la piña no pagaban aranceles, pero desde su vencimiento, el 12 de febrero pasado, el primero tributa 1% y el segundo 0,2% del volumen exportado. Bernardo Malo, presidente de la Fundación Mango Ecuador, explica que para el sector el gravamen equivale a 6,6 centavos por kilo. Como la medida estándar es de 4 kilos, el rubro pasa a 26 centavos por cartón.
“Es un valor muy significativo y deja al sector en pronóstico reservado”. No solo por lo que pierde el exportador sino por lo delicado del impacto al productor y la fuerza laboral, destaca Malo, desde las oficinas de la Fundación, en el centro de Guayaquil.
A unos 55 km de allí, donde los caminos de tierra reemplazan al pavimento, está Víctor Huacón. Él es uno de los 14 trabajadores perennes que hay en la hacienda La Manga, donde se cultivan 33,5 hectáreas de mango tommy atkins y kent, variedades apetecidas por los estadounidenses.
Es la temporada baja. Solo hay trabajos de mantenimiento, pero desde octubre la finca albergará a 50 personas para la cosecha y otros cientos de trabajadores temporales reaparecerán para ofrecer servicios de transporte, venta de cartones y mano de obra para empacar la fruta.Huacón administra La Manga hace 20 años. La finca está en el recinto Las Mercedes, del cantón Isidro Ayora (Guayas). Él cumple con su tarea diaria, de la cual dependen sus dos niños de 8 y 2 años, y su esposa que lo espera cada noche, en casa, en el km 24,5 de la vía a Daule, en Guayaquil.
“Mi jefe ha viajado para conocer un problema con la exportación de mango a Estados Unidos, pero dijo que al regreso nos contaría detalles”, dice Huacón, quien gana un salario superior al básico.
Algo que no sucede con su compañero César Toala, quien percibe USD 264 al mes. Es quien conduce una máquina rozadora, encargada de arrancar la maleza que rodea los cientos de árboles que florecerán en agosto y darán frutos en septiembre. La cosecha va desde octubre hasta enero.
La entrega en el trabajo de ambos les hace tener fe de que su empleo no correrá peligro.
Pero su situación laboral se reduce a estadísticas proyectadas por el Gobierno y las empresas.
Según el Ministerio Coordinador de la Producción, existen 106 884 empleos relacionados con el sector de mangos y piñas. Pero de esos, se perderían o afectarían 420 plazas de trabajo por la no renovación de la Atpdea. Fundación Mango Ecuador cree serán 7 000 plazas laborales.
Con ese antecedente, Sergio Cedeño, gerente de agrícola Pivano, sustenta su tesis de que sin Atpdea el más afectado será el productor y la fuerza laboral a su alrededor y no los exportadores.
El productor Rafael Chiriboga prefiere no analizar la proyección numérica del impacto, sin las preferencias arancelarias. Le parece que la satisfacción o sufrimiento de cada persona por tener o no un trabajo, nunca debe compararse con fríos números. Pero es crítico.
“Trabajamos para sobrevivir; nos cuesta cada centavo que ganamos y que ahora se pueden ir en un tributo. Más obstáculos”.
Ahora le toca hacer reingeniería en Quevedo (Los Ríos), para reemplazar la piña por el cacao. De su producción de mangos en Palestina (Guayas) espera que florezca. En 40 hectáreas empleará a 120 persona para su cosecha
El Gobierno le apuesta al SGP
La ministra Coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, se reunió ayer con empresarios agroexportadores de mango, en Guayaquil. En la cita encontraron como alternativa, para paliar los efectos de la no renovación de la Atpdea, otro beneficio arancelario que entrega Estados Unidos.
Se trata del Sistema Generalizado de Preferencias (SGP), que se otorga a 122 naciones en vías de desarrollo, permitiendo el ingreso de productos con cero arancel.
En esta lista se encuentra Ecuador, y entre sus productos está el mango. El problema es que el SGP dejó de estar vigente en diciembre pasado.
Cely les dijo a los empresarios que EE.UU. posiblemente renovará este instrumento después de 60 días. El temor entre el sector es que con la deteriorada relación diplomática con ese país, Ecuador sea eliminado de dicha lista.
También ofreció potencializar el mercado mexicano, donde esta fruta paga un arancel del 14%. Pero ello podría reducirse a través de acuerdos bilaterales.