Por cada USD 100 que envía un emigrante a través de las remesadoras, la agencia que realiza la transacción recibe entre USD 3 y 4 como comisión. Además, los familiares deben adicionar el costo de los pasajes de bus o taxis por la movilización hasta las zonas donde están estas agencias.
Una propuesta liderada por el Banco Central del Ecuador (BCE) y presentada ayer en Cuenca, fija la comisión en el 2% del monto enviado. El sistema se llama BCE-RIA y ocupa los canales de Ria Financial Services (con 10 000 puntos de recepción en EE.UU.) y unos 500 puntos de pago en Ecuador.
Estos últimos son cajas de ahorro, bancos comunales y cooperativas de ahorro y crédito que forman parte de la Red Nacional de Finanzas Populares y Solidarias del Ecuador (Renafipse), explicó Andrés Aráuz, director general bancario del BCE.
La idea, explica, es que los dineros prevenientes del extranjero lleguen lo más cerca posible de los destinatarios. Es decir a sus comunidades, poblados, parroquias o cabeceras cantonales y a un costo reducido.
En la primera fase hay 37 cooperativas de ahorro y crédito que integran a más de 140 estructuras financieras alternativas (pequeñas cooperativas y bancos comunales), dijo Rodrigo Aucay, presidente de la Renafipse.
Según los funcionarios, la intención es incorporar a este sistema a unas 200 cooperativas de ahorro y crédito y 600 estructuras financieras locales a escala nacional. El sistema está en operación desde este mes.
El BCE desarrolló una primera fase de pilotaje con las cooperativas Coopera, Señor de Girón, Integral (Azuay) y Familia Austral (Cañar). Durante los tres primeros meses de este año ingresaron al Austro USD 543,8 millones por concepto de remesas, según datos del BCE.
De ese rubro, USD 194,5 millones ingresaron entre julio y septiembre pasados al Austro. Según un informe del BCE, Cuenca, Loja y Azogues receptaron el 68,8% de esos recursos.