El sorpresivo anuncio del Régimen de transferir las acciones que mantenía, hasta el pasado viernes, el Banco Central en el Banco del Pacífico hacia la Corporación Financiera Nacional (CFN) no está claro y las autoridades únicamente señalan “que no pasará nada”.
Así lo afirmó el superintendente de Bancos, Pedro Solines, quien aseguró que únicamente se trata de un traspaso administrativo pero que en último término continúa siendo el Estado el dueño de dichas acciones.
Mientras el titular de la CFN, Camilo Samán, señaló que la operación se dio con el objetivo de impulsar al sector productivo a través de líneas de crédito de segundo piso, que la CFN proporcionará a dicho banco. “La administración y el manejo del Pacífico se mantendrán exactamente iguales garantizando su normal funcionamiento y estabilidad”.
Pero para personas que trabajaron de cerca en el proceso que vivió el Banco del Pacífico, al ser adquirido por el Central tras la crisis financiera del 2000, esta trasferencia es muy confusa.
Fabián Carrillo, ex viceministro de Economía y ex funcionario del Central, sentencia que se trata de un “pretexto burdo para meterle mano al Banco del Pacífico. No había razón para hacerlo”.
El economista explica que cuando el Pacífico pasó a manos del Central, las administraciones extranjeras se aseguraron de que su manejo sea independiente de lo político y sean técnicos.
“El Pacífico ha estado creciendo los últimos años. Con esto va a haber más injerencia política. Se puede perder mucho de lo que se ha hecho. No queda claro cómo van a operar CFN y Pacífico independientemente. Y ¿cuál será la afectación patrimonial (costo de las acciones) al Central?”.
Para el catedrático Diego Mancheno, que ha trabajado también en el Central, la noticia es sorpresiva. “El dueño del Pacífico era el Central, porque compró cuando estaba en proceso de liquidación. No es como pasar las acciones de un Ministerio a otro. Tanto la CFN como el Central son entidades autónomas. ¿Qué le va a dar a cambio la CFN al Central por el traspaso de las acciones?
Según la Ley, se le faculta al Régimen transferir “a título gratuito” los activos del Central, es decir, no necesita que le den nada a cambio, como cuestiona Mancheno.
Por ello, Carrillo añade que es más visible aún el manejo político antes que económico de la trasferencia. “Es conocido que el Presidente no le tiene simpatía al Central. Desde hace varios años se ha venido quitándole activos y este es otro paso más en ese sentido”.
Marco López, ex director del Central, también afirma que el traspaso genera muchas dudas en el mercado financiero. “Se trata de una descapitalización del Central para mejorar los indicadores de la CFN. Una financiera o banco no puede ser dueño de otro banco. El Estado se ha empeñado en crear una ley antimonopolio pero no lo esta cumpliendo”.
López sostuvo que con ese traspaso se está condonando deudas ya que el Pacífico tenía obligaciones con el Central. “Quién le va a devolver las aportaciones que ha hecho el Estado. Habrá que ver cuánto es la valoración del banco para determinar el aumento del patrimonio de la CFN”.
En este escenario, el Banco del Pacífico, en un comunicado informó que mantiene su condición jurídica, sujeta a las normas y disposiciones que regulan la actividad financiera privada en el país.
“La administración actual continuará trabajando junto a sus clientes en el cumplimiento de objetivos y planes estratégicos trazados, que le han permitido ubicarse en los primeros lugares”.