Pensando en Navidad, no debe haber mejor lugar en el planeta que pasarla en el mundo mágico de Disney. Allá piensan en todo para que todo el mundo se divierta. El recorrido empieza con la visita al magnífico castillo de invierno de la Bella Durmiente. Tiene más de 50 000 luces que iluminan la nieve que cae desde sus torres. Las estalactitas se encienden con el blanco del invierno glacial. Es como para sentirse parte del cuento de hadas.
Juegos y eventos
Disney ofrece la posibilidad de crear su propia tarjeta de Navidad electrónica con los personajes del parque.
También ofrece la posibilidad de colorear las páginas con escenas impresionantes de películas de Disney.
Para los más chicos existe la opción de crear en línea un muñeco de nieve. Es un juego de ingenio que lo divertirá mucho.Entonces, repentinamente, un ensordecedor bramido rompe hasta el profundo sueño de la Bella Durmiente, e inmediatamente se ven saetas de fuego que se elevan en el espacio. Es la hora de ver los fabulosos fuegos artificiales. Este espectáculo no siempre se puede presenciar, antes de ir, es necesario consultar los cronogramas de actividades en la Internet.
En Disney también hay que estar atento al reloj para alcanzar al inicio del desfile navideño. Todo empieza cuando aparecen los soldaditos de juguete de tamaño extragrande. Parecen hechos de madera. Tocan la trompeta y visten gorros y guerreras rojos. Pantalones blancos y largas botas negras. Tienen los ojos pequeños, como capulíes.
A ellos se suman Mickey y Minnie patinando sobre un lago congelado, también aparecen Goofy y Max decorando una casa de jengibre de tamaño natural. Por otro lado Pinocho y Gepeto trabajan conjuntamente para elaborar juguetes, mientras los renos danzan junto a algunos copos de nieve con el ambiente de canciones de Navidad.
Para la noche, mientras el cielo se apaga, las miles de lucecitas del desfile nocturno de Navidad de Disney se encienden. Es el más memorable de los shows que se presentan allá. Los fantásticos carros alegóricos se pasean por todo el parque electrificando el espíritu de los visitantes. En el desfile todo es festivo, la Navidad vibra en el aire y contagia a los turistas.
Este mundo navideño de guirnaldas y dulces también es encontrado por los habitantes del mundo de Halloween. En la mansión encantada de Jack Skellington se puede observar cómo los personajes de ‘Nigthmare before Christmas’ celebran el 25 de diciembre con su estilo pintoresco y macabro. El cementerio está cubierto de nieve, y hay muchas calabazas animadas. Se puede presenciar una sesión espiritista de Madame Leota para conocer lo que dice acerca de los 13 Días para Navidad. Y si se tiene mucho miedo, pues nada más hay que correr hacia el techo para escapar en el trineo de ataúd de Sandy Claws.
Dejando a un lado el peculiar encuentro entre Halloween y Navidad, sin salir de Disney se puede visitar varias tradiciones navideñas del mundo. Niños de diferentes países cantan villancicos de sus lugares de origen, llevan trajes típicos y muestran las tradiciones locales.
Para el gran final, no se podía esperar algo menos que la aparición de Santa con un grupo de sus renos de verdad que lo sorprendarán gratamente.
Se puede visitar la cabaña de este querido personaje en donde la señora Santa enseña las decoraciones favoritas. Hasta Pluto está contagiado por las navidades en Disney y se ha convertido en un perro-reno, que le llenará de caricias.