Los parlantes, cubiertos de piedra, fueron colocados en el parque de Santo Domingo. Foto: Juan Carlos Pérez/ EL COMERCIO
El sonido de la música folclórica se escucha en el parque Joaquín Zaracay de Santo Domingo, en el occidente de Ecuador. Las personas que transitan por el lugar tratan de encontrar los parlantes por los que se emite el sonido. Pero no los hallan con facilidad.
Se debe a que el sonido se proyecta desde el Municipio de forma subterránea hasta unos parlantes con forma de piedras. Estas se confunden entre los jardines del parque.
María José Ramos, de 20 años, pensó que la música provenía de los cantantes que acostumbran a tocar en las tardes a cambio de monedas que le obsequian los usuarios del parque. Este sitio público se fundó el 17 de octubre de 1954.
Según el Municipio de Santo Domingo, de a poco se le han realizado cambios al parque. El diseño de los cerca de 12 parlantes se escogió porque desde 1999, durante la alcaldía de Holger Velasteguí, se cambió por primera vez la estructura y el diseño del parque.
En este proyecto, la piedra fue el material que se destacó. Se utilizó para cubrir el suelo, que era de tierra. También para adecuar bancas públicas. Con esta remodelación se buscó respetar el diseño tradicional del parque.
Los parlantes se confunden entre los jardines del parque Joaquín Zaracay, de Santo Domingo. Foto: Juan Carlos Pérez/ EL COMERCIO
El fotógrafo del parque desde hace más de 50 años, Jorge Villalba, asegura que ya son varios cambios desde que se fundó. Por ejemplo, en esa época predominaban las flores y los árboles endémicos. Recuerda que sus primeras gráficas tuvieron como fondo un paisaje natural, casi selvático que gustaba a las familias.
Hoy, el parque también tiene espacios de cemento y piedra, característicos de la modernidad. Hay 15 puntos de iluminación y plantas ornamentales. Además el 30 de mayo de 2015 se instalaron 12 bancas, que fueron obsequiadas por familias representativas de Santo Domingo, que han sido testigos de la evolución del parque Joaquín Zaracay, que lleva el nombre del primer gobernador de la nacionalidad tsáchila.
Villalba señaló que con las nuevas bancas de hierro forjado, el parque ya no será solo un lugar de paso sino un sitio de recreación como lo era hace 50 años.
El alcalde de Santo Domingo Víctor Manuel Quirola aseguró que ese es uno de los objetivos de arreglarlo. “Queremos que la gente se apropie de los lugares históricos”.
Para el Burgomaestre el parque es uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Ahí se realiza cada lunes un momento cívico en el que las autoridades, funcionarios públicos y estudiantes cantan el himno a Ecuador y al cantón.