La desaparición del ex candidato presidencial Diego Fernández de Cevallos coincide con el ambiente de violencia de la campaña electoral en México. El próximo 4 de julio se elegirán gobernadores, diputados y alcaldes en 14 estados del norte de ese país.
“Ser candidato es complicado y difícil por el clima de inseguridad, se ha hecho cotidiana la violencia”, aseguró Javier Garza, jefe en el estado de Tamaulipas del Partido Acción Nacional (PAN) del presidente Felipe Calderón.Muchos aspirantes modificaron sus estrategias de propaganda para no exponerse ni ellos ni a sus seguidores, sobre todo en ese estado y en otros como Chihuahua, Durango o Sinaloa. Incluso algunos partidos no postularon, por temor, candidatos a diputados y alcaldes, como pasó en municipios de Tamaulipas, donde fue asesinado la semana pasada el candidato del PAN a la alcaldía de Valle Hermoso, José Guajardo.
Algunos postulantes optaron por no hacer campaña, otros cancelaron actos masivos, unos cuantos eligieron pegar calcomanías en vehículos y hay unos pocos que decidieron golpear las puertas de los electores.
“Las campañas cambian de estrategia, se tienen que hacer cosas distintas. En algunos lugares serán cerrados los mítines, dependiendo el grado de riesgo de cada municipio”, admitió Garza.
En Chihuahua, las autoridades electorales ofrecieron guardaespaldas a los candidatos.
“La lógica más probable es que (los narcotraficantes) calculen que algún candidato con probabilidad de ganar no va a pactar con ellos, que les va a complicar el negocio y prefieren eliminarlo”, sostuvo el analista Jorge Chabat, del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE).
La semana pasada, el presidente Calderón señaló que le preocupaba que el narcotráfico pudiera usar su poder para imponer candidatos, sobre todo a nivel municipal, y que por eso los partidos redoblaban controles.
Calderón reconoció que México vive etapas similares a las que padeció Colombia en los tiempos de mayor violencia. Es el primer Presidente mexicano que se refiere al tema de esta manera, según publicó ayer la cadena británica BBC. “Hay fases que estuvieron presentes en el crimen organizado en Colombia desde los 80, que en México se están presentando y que, afortunadamente, las estamos combatiendo”, expresó.
Calderón cree que México puede salir en el corto plazo de esta fase e incluso evitar el caos que vivió Colombia, con asesinatos de presidenciales o el secuestro de la Corte de Justicia.Además, en gira por España, el Presidente rechazó las críticas de que la acción del Gobierno es la que ha provocado la situación de inseguridad en el país
Un estudio de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial confirmó que México ostenta el número uno en secuestros tradicionales y de tipo exprés, con 8 000 casos denunciados al año.
La desaparición, sin pistas
El Ejército Popular Revolucionario (EPR) se deslindó de la desaparición del ex candidato presidencial Diego Fernández de Cevallos. La organización lamentó la desaparición del senador ocurrida el viernes en Querétaro.
El EPR, surgido en 1996, más bien se solidarizó con la familia del político del Partido Acción Nacional (PAN).
La familia de Fernández de Cevallos lanzó un llamado para que las personas que lo mantengan retenido entablen comunicación en aras de negociar su liberación.
Los partidos integrantes la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) también hicieron votos por la pronta liberación de Fernández de Cevallos.
Las autoridades encargadas de investigar el caso lo manejan oficialmente como una “desaparición”, mientras fuentes policiales no descartan la hipótesis de un secuestro, una acción del crimen organizado o una venganza.
Ayer, afuera de la finca de Diego Fernández de Cevallos, su hermano mayor Manuel pidió comprensión a los medios de comunicación, a fin de no entorpecer las investigaciones por la desaparición del ex senador panista.
El rancho La Cabaña, en el estado de Querétaro, de donde desapareció el político, seguía ayer bajo vigilancia de la Policía Federal y la Policía Municipal. ANSA