Vinicius, junto con el genial maestro de la música Tom Jobim, es uno de los padres de la canción más famosa de Brasil: La chica de Ipanema.
Sus miles de seguidores están de fiesta con la reedición de uno de los libros clásicos de Vinicius. ‘Para una niña con una flor’, un hermoso compendio de las mejores crónicas de Moraes, aparecidas entre 1941 y 1966 en distintos periódicos y revistas de su país.
Como periodista, poeta y compositor, Vinicius de Moraes evidencia en cada uno de sus textos su grandeza para manejar la palabra como eficaz herramienta para comunicar sus sentimientos, sus vivencias, sus experiencias, sus sensaciones y sus nostalgias.
‘Para una niña con una flor’ tiene de to-do: recuerdos, mujeres lejanas o próximas, cálidas, misteriosas, frutales, amigos, paisajes.
Vinicius sorprende porque no es un poeta que se limita a escribir de amor, porque entiende que la vida no solamente es amor sino un inmenso abanico multicolor.
En las páginas de ‘Para una niña con una flor’ el poeta introduce el tema del patriotismo, “un patriotismo compuesto por todo y por nada, por sabores y esperanzas, más que política. Y la muerte como remembranza y melancolía. Y relatos, leves y algo tristes”.
Se trata de un libro donde cada página viene impregnada de percepciones populares y sentidos colectivos “con el suave e inimitable lirismo característico de uno de los más importantes poetas brasileños del siglo XX”.
Vinicius sorprende y encanta porque tiene otra virtud: su palabra es él mismo, son sus cigarrillos, sus licores, su música, sus versos, su infinita vocación por las mujeres.
Tanto así, que el libro ‘Para una niña con una flor’ está dedicado a Nelita, la tercera esposa del poeta, a quien llama “mi amada última”, aunque luego se casaría cuatro veces más.
Pero ‘Para una niña con una flor’ no tendría el sello de Vinicius si no viniera también con poemas intercalados entre una y otra crónica periodística.
Con la fuerza y la energía que imprimió a cada aspecto de su vida, el artista, fallecido en julio de 1980, tuvo una incidencia fundamental en el arte brasileño.
Por sus manos y su genio creador pasaron el bossa nova, la nueva canción, la poesía en prosa, el cine, el teatro, la pintura, el periodismo.
‘Para una niña con una flor’ es un libro inolvidable. Por su intensa poesía y su maravillosas crónicas personales.
“Ella avanza,/rigurosa,/ en remolinos nítidos,/creando vacíos donde mueren las aves./ Su cuerpo, poco a poco/se abre en pétalos y se acerca/como una oscura rosa que da vueltas…”.
A Vinicius siempre habrá que agradecerle su ternura.