Un segundo doctor cubano abandonó el programa de médicos extranjeros en Brasil, confirmó el lunes el ministerio de Salud, mientras que los medios locales informaron que éste viajó a Estados Unidos.
Ortelio Jaime Guerra, que llegó a Brasil a mediados de noviembre para el programa gubernamental “Más Médicos”, dejó de presentarse a su centro de labores en el municipio de Pariquera-Acu, en el estado de Sao Paulo.
“El Ministerio de Salud fue notificado recientemente que ese médico no compareció a su trabajo. Comprobamos que desistió del programa. Vamos a desvincularlo y a proceder a su reposición por otro profesional”, dijo a la AFP un portavoz de la institución.
Guerra habría viajado a Estados Unidos, según consta en unos comentarios que publicó en su cuenta de la red social Facebook y que fueron difundidos por medios locales. “Para todos mis amigos que me han enviado mensajes preocupados por mi ausencia (…) estoy bien, ahora en los Estados Unidos”, escribió Guerra el 9 de febrero, como comentario a una de sus fotografías.
El Ministerio de Salud no estuvo en condiciones de informar acerca del paradero del médico. Se trata del segundo caso conocido de deserción demédicos cubanos al programa “Más Médicos”.
La semana pasada, la cubana Ramona Matos Rodríguez pidió refugio en los Estados Unidos, tras solicitar la ayuda del partido opositor conservador brasileño DEM. Matos dijo que se sintió engañada en este programa estrella del gobierno brasileño, que busca llevar médicos a las áreas más aisladas de su gigantesco territorio.
El programa incluye médicos de numerosas nacionalidades y en él participan un gran número cubanos. El gobierno brasileño estipuló un pago equivalente a unos USD 4 000 dólares a los médicos extranjeros, pero el acuerdo con Cuba se realizó entre gobiernos, a través de la Organización Panamericana de la Salud, y los médicos de esa nacionalidad reciben mucho menos.
“Nosotros recibimos 400 dólares mensuales en Brasil, y nos ingresan 600 en Cuba”, explicó Matos. Guerra, en tanto, no detalló las razones de su deserción. El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, alertó en su momento que si el médico extranjero que está en el programa lo abandona pierde su visa y su licencia para ejercer en el país, por lo que hasta podría ser deportado.
Brasil, que tiene muy buenas relaciones políticas y económicas con Cuba, tiene tradición de otorgar asilo a quienes lo piden, también a cubanos.