Un empleado de la Embajada holandesa en Trípoli habló con él. Le dijo que su nombre era Rubén, que tenía 9 años y que era de Tilburgo (Holanda).
Así reveló ayer el Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país la identidad del único superviviente del accidente aéreo en la capital de Libia, el miércoles, que costó la vida a 103 personas.Rubén van Assouw se ha quedado huérfano. Todavía muy sedado, el chico no sabe que ha perdido a sus padres, Trudy y Patrick. Su hermano mayor, Enzo, tampoco sobrevivió, según diario El País de España. Tras el choque, lo único que dijo Rubén a sus rescatadores fue: “Holanda, Holanda”.
La familia había ido de safari a Sudáfrica y regresaba a su país en el vuelo de Afriqiyah Airways aprovechando las vacaciones escolares de mayo, que concluyen hoy. Johannesburgo es un popular destino turístico para los holandeses.
De los fallecidos en el accidente, 70 eran ciudadanos holandeses, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Holanda. Los otros fallecidos pertenecen a nueve nacionalidades.
La galardonada escritora Bree O’Mara, quien se dirigía a Gran Bretaña para firmar el acuerdo de un libro, está entre los muertos, reportaron medios sudafricanos.
El menor fue transportado a un hospital cerca de Trípoli. Siddiq ben Dilla. El médico que lo operó indicó que el estado de salud del niño es “bueno”. Se está recuperando, empieza a hablar y ha pedido comer”, explicó el médico, que aseguró haber “reparado todas las fracturas sufridas por Rubén en las piernas.
El niño podría ser repatriado dentro de dos días si su estado sigue mejorando, añadió el médico, quien destacó también que la memoria del niño es buena, dando por prueba que sonrió al ver llegar a su lado a su tía paterna y a su tío materno.
Ellos, abrumados por lo ocurrido, fueron a buscar a Rubén a Libia. Jeroen (hermano del padre) e Ingrid (de la madre), se quedarán hasta que Rubén pueda regresar a casa. En el mismo avión oficial, fletado por el Gobierno holandés, viajaron seis forenses que ayudarán en la investigación sobre las causas del siniestro.
Mientras dichos expertos recogen muestras sobre el terreno, en la pista y alrededores del aeropuerto de Trípoli, en Holanda hará lo propio otro equipo similar con las familias del resto de las víctimas.
El accidente del vuelo 84771 de la compañía Afriqiyah Airways, un A330, procedente de Johannesburgo, se estrelló durante el aterrizaje en Trípoli. Fue en una escala técnica que debía servir para que buena parte de los pasajeros, en especial los holandeses, abordaran otros aviones camino de Alemania y Bélgica.
El destino final era el aeropuerto londinense de Gatwick, pero los turistas de Holanda habían contratado sus vacaciones con dos agencias que incluían esta escala. Según el rotativo De Telegraaf, “una familia entera, con cinco miembros, y otro varón, viajaban en el mismo avión”.
Sobre las causas del accidente solo hay especulaciones, pero el ministro libio de Transporte, Mohammed Ali Zidan, descartó la hipótesis de un atentado terrorista. Sí está claro que la nube volcánica no ha influido, según la cadena BBC de Londres. Los expertos buscan pistas en el contenido de las cajas negras del Airbus A330.