La Policía británica lanzó esta semana un amplio operativo de seguridad para dar con un peligroso ladrón, conocido como ‘Skull Cracker‘ (triturador de cráneos), quien se escapó de una prisión del sureste de Inglaterra y fue visto este lunes en Londres.
Michael Wheatley, condenado por una serie de robos con armas y que cumplía una condena de libertad condicional, no regresó a la prisión de Standford Hill (Kent) en una de sus salidas autorizadas.
El hombre, de 55 años, fue visto este lunes por la noche en el barrio de Twickenham, al sudoeste de la capital.
En 2002, Wheatley fue condenado a 13 años en prisión por una serie de robos con armas de fuego a bancos y entidades financieras durante un período de 10 meses.
Además, había estado involucrado en otros 27 robos. El hombre recibió el apodo de ‘triturador de cráneos’ ya que utilizaba la culata de sus pistolas para golpear a sus víctimas en la cabeza.
En uno de sus robos, Wheatley golpeó salvajemente a una mujer de 73 años, quien sin embargo logró recuperarse de las heridas.
Este lunes (5 de mayo del 2014), el parlamentario conservador Philip Davies afirmó que la persona que autorizó la salida del preso “no estaba en su sano juicio”.
“Es una locura total que a un prisionero que cumple penas de tantos años se le permita salir de prisión. La persona que autorizó su salida debería ser despedida”, agregó.
Por su parte, el ministro para Prisiones, Jeremy Wright, dijo que tras el hecho se lanzará una revisión del caso.
La Policía británica aconsejó a la población no acercarse a Wheatley, quien nació en el este de Londres y según las autoridades cuenta con vínculos en gran parte del sudeste de Inglaterra.