Al menos 48 personas murieron y 34 resultaron heridas ayer en atentados suicidas en Iraq, uno de estos ataques fue perpetrado con atacantes con síndrome de Down. Según fuentes de la Policía iraquí, dos suicidas que padecían esa enfermedad se mezclaron entre los miembros de una milicia de autodefensa en Bagdad cuando estos estaban haciendo fila para recibir sus salarios. Un total de 36 personas murieron y otras 28 resultaron heridas después de que los dos atacantes hicieron estallar los explosivos que llevaban sujetos al cuerpo. La detonación fue en el barrio sunita de Al Radwaniya en la capital. Algunos medios locales difundieron recientemente informaciones respecto a la nueva estrategia de la insurgencia de recurrir a personas con discapacidades mentales para que se inmolen con cinturones explosivos. “Había más de 85 personas distribuidas en tres líneas en la puerta principal de la base militar para recibir salarios, cuando una persona se nos acercó. De repente uno de los soldados intentó detenerlo, y entonces él se inmoló”, dijo Tayseer Mehsen, un sobreviviente de 20 años, en el hospital Mahmudiya. “Perdí la conciencia y desperté para encontrarme en el hospital”, agregó.Entre las víctimas están el líder de la milicia, Sahwa Al Haj Abd, y cuatro de sus hermanos, señalaron las fuentes de seguridad. Mientras, en la provincia de Al Anbar, cuatro combatientes de Sahwa, incluido su líder Jelief Ahmed, perdieron la vida en otro atentado perpetrado por un atacante suicida. Insurgentes sunitas ligados a Al Qaeda buscan aprovechar el vacío político creado por el fracaso de las facciones sunitas, chiitas y kurdas de acordar una coalición de Gobierno, y han venido realizando una serie de ataques desde la última votación.Seis personas resultaron además heridas durante una reunión de Sahwa en el área de Al Qaem, unos 500 kilómetros al oeste de Bagdad, dijo la Policía. Sahwa está integrada por combatientes sunitas, que antes formaban parte de la insurgencia, y que han venido apoyando al Gobierno en su lucha contra Al Qaida, además de haber contribuido a restablecer el orden en el país. De hecho, ha habido una serie de ataques contra líderes de los Sahwa en zonas sunitas en torno a Bagdad en meses recientes, muchos atribuidos a actos de venganza de compañeros insurgentes o Al Qaeda. Algunos han sido atribuidos a antiguas disputas sangrientas entre familias. La guerra sectaria entre los alguna vez dominantes sunitas y la mayoría chiita ha desaparecido en gran parte, pero aún persiste una terca insurgencia sunita.