El 9 de julio del 2007, el presidente Rafael Correa firmó un Decreto prohibiendo la reproducción de videos que hubieren sido grabados clandestinamente sin la autorización de las personas que aparecen en ellos.
El Decreto se lo firmó pocos días más tarde de que estallara el escándalo de los ‘pativideos’ y poco antes de que el ministro Ricardo Patiño asistiera al Congreso para un juicio político en su contra.
Según Correa, la finalidad del Decreto era proteger la privacidad de las personas.
La Embajada de los EE.UU., sin embargo, no creyó en la sinceridad de la motivación de Correa para expedir la norma.
“Con los recientes incidentes de los videos grabados a miembros del Gabinete del presidente Correa, luce muy improbable que el Decreto se haya originado en el deseo altruístico para proteger la privacidad personal. Es más probable que Correa esté tratando, más bien, de evitar cualquier afectación o distracción a su carrera hacia las elecciones para la Asamblea Constituyente”, dice el cable 116146 de julio del 2007.
El documento también recoge todas las críticas que hizo la prensa al Decreto que exceptuaba los grabaciones hechas por medios públicos.