La infanta Cristina renuncia a apelar y comparecerá ante la justicia

La infanta Cristina fotografiada el 5 de abril del 2013, en Barcelona. Foto: EFE

La infanta Cristina fotografiada el 5 de abril del 2013, en Barcelona. Foto: EFE

La infanta Cristina, hija del rey Juan Carlos de España, no apelará su imputación en un caso de fraude fiscal y comparecerá voluntariamente, anunció su abogado este sábado, en un escándalo que asestó un duro golpe a la familia real.

La defensa reiteró la inocencia de la infanta, a la que el juez José Castro, del tribunal de Palma de Mallorca, imputó el martes por fraude fiscal y blanqueo de capitales, pero dijeron que comparecerá para no prolongar el proceso.

La infanta "ha decidido renunciar al derecho al recurso... y comparecer voluntariamente ante el Ilmo. Sr. Juez Instructor en la fecha que se señale a tal efecto", dijo en un comunicado el despacho de abogados que la defiende, Roca Junyent. Los abogados aseguraron que la infanta no tiene "nada que ocultar ante el Ilmo. Sr. Juez Instructor ni ante el conjunto de la sociedad española" y juzgaron "sin fundamento jurídico" la convocatoria de los jueces. No obstante, consideraron que la interposición de un recurso "se traduciría en una dilación del procedimiento, alargándose así la incómoda y, a su entender, injusta situación que se deriva para ella del presente procedimiento".

El juez Castro convocó a la infanta a declarar el 8 de marzo. Este caso está relacionado con los negocios de su marido, el exjugador olímpico de balonmano Iñaki Urdangarín.

La infanta, de 48 años, y su marido, de 45, son propietarios a partes iguales de la sociedad Aizoon, de la que un juez sospecha que ha podido servir de pantalla para desviar fondos públicos.

Urdangarín está imputado desde el 29 de diciembre de 2011, por supuestamente haber desviado 6,1 millones de euros de dinero público junto a su exsocio Diego torres. Ambos habrían conseguido, vía el Instituto Noos, una sociedad sin ánimo de lucro que presidió entre 2004 y 2006, contratos con las autoridades regionales de Baleares y Valencia para la organización y promoción de congresos relacionados con el deporte.

La imputación de la infanta supone un duro golpe para su imagen y para el rey Juan Carlos. Juan Carlos gozó de una gran popularidad gracias al papel que desempeñó durante la transición de España hacia la democracia, tras llegar a la jefatura del Estado dos días después de la muerte del dictador Francisco Franco, en noviembre de 1975. Su reputación se vio empañada por los escándalos de corrupción y por un viaje que realizó en abril de 2012 a Botswana para cazar elefantes, que salió a la luz debido a que el rey se cayó y se rompió la cadera, lo que le llevó a pedir disculpas al país, algo inédito. A estos escándalos se unen los problemas de salud del monarca, de 76 años, lo que ha relanzado las especulaciones sobre el futuro de su reinado.

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