Ayer por la mañana (16 de febrero de 2014), el líder de la oposición venezolana y gobernador del céntrico estado Miranda, Henrique Capriles, acusó al presidente Nicolás Maduro de tener un plan para mantener las protestas en el país con infiltrados violentos.
Según Capriles, con el fin de enmascarar los verdaderos problemas que Venezuela afronta en estos momentos. “Es obvio que aquí hay un plan para tratar de tapar los graves problemas que vive el país”, dijo.
Finalmente, el líder opositor dijo que convocará a una manifestación contra la violencia y para exigir el desarme de los grupos radicales que dicen apoyar al gobierno del presidente Maduro.
Nuevamente miles de estudiantes opositores volvieron a salir a la calle ayer en Caracas para denunciar la violencia que grupos de encapuchados han desatado tras sus manifestaciones en los últimos días, con saldo de tres muertos. Estos hechos han sido atribuídos a grupos de infiltrados.
Más de 3 000 personas, en su mayoría jóvenes, se dieron cita en el sector este de Caracas para realizar una asamblea en la que repudiaron la violencia que se ha registrado en la capital venezolana y también en otras ciudades del país.
“¡Le exigimos a Nicolás Maduro el desarme de los colectivos, ¡hasta que no los desarmen, no dejaremos las calles!”, clamó ante la multitud Gabriela Arellano, estudiante de la Universidad de los Andes y una de las cabezas del movimiento.
La joranda terminó con la denuncia del Partido Voluntad Popular, sobre un supuesto allanamiento que efectuaron efectivos de la Dirección General Sectorial de Contra Inteligencia Militar (DGSCIM) y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), del domicilio del opositor Leopoldo López y la residencia de sus padres.
La formación política indicó en un comunicado que “unos 15 efectivos militares” acudieron a la casa de la familia del dirigente opositor ayer en la noche y “minutos después otra comisión con 20 funcionarios llegó a la casa de López ubicada en el municipio Chacao”, en el este de Caracas.
El partido señaló que “en ninguno de los dos procedimientos los funcionarios contaron con orden de registro”, y que en la segunda intervención mostraron la orden de captura emanada por el tribunal 16 de control de Caracas, en la que se le imputan a López los delitos de homicidio intencional. También se le imputan terrorismo, lesiones graves, etc.
Brigada militar secreta
El plan de paz presentado el viernes pasado, que consta de 10 medidas, muy similares a los de otros proyectos puestos en marcha por su antecesor Hugo Chávez, consta de novedades.
EL décimo punto señala: “La creación de una brigada policial y militar especial para investigar, combatir y neutralizar a los grupos de paramilitares y del narcotráfico enviados desde Colombia para aumentar los índices delictivos”.
Tras revelar que este nuevo organismo estará integrado “por cuadros especiales” que se seleccionarán de los distintos organismos existentes, el Mandatario anunció que será “secreto”, aunque actuará siguiendo una ley que dictará próximamente, gracias a los poderes especiales que le otorgó a finales del año pasado el Parlamento para legislar.
“Vamos a limpiar a nuestro país de grupos que han venido al país a matar, a sicariar”, soltó en un tono muy poco pacífico Maduro, quien sostuvo sus sospechas de que los altos índices de criminalidad del país son en buena parte inducidos.
“Hay organizaciones regalando droga para hacerlos dependientes y usarlos para fines inconfesables”, dijo sin aportar pruebas.
Asimismo, Maduro anunció que reformará leyes para promover la justicia de paz y hacer más eficaz el sistema de justicia del país .
Además, puso al frente del equipo que revisará el marco legal vigente a su esposa, Cilia Flores, responsable de la última reforma que sufrió el Código Orgánico Procesal Penal (COPP), ley que regula los procesos penales en el país y por la cual se eliminaron los jurados (especie de jurados) y le arrebató a las organizaciones de derechos humanos la facultad de representar a ciudadanos víctimas de abusos.