El embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Roy Chaderton, repudió este miércoles 19 de febrero la posición de medios de prensa internacionales ante la situación de protestas en Venezuela y cargó contra Estados Unidos.
El diplomático relacionó a la cadena de televisión CNN y al periódico The Washington Post con un “montaje en redes sociales” y una campaña de desprestigio sobre la democracia en el país sudamericano.
Chaderton expuso en una sesión ordinaria en el Consejo Permanente de la OEA, en la que Estados Unidos y Canadá pusieron en el temario la situación de Venezuela para pedir al Gobierno de Nicolás Maduro que entable un diálogo con la oposición.
El embajador venezolano apuntó a “la mafia cubano-estadounidense, al extremismo religioso norteamericano” y a otros sectores de presentar una imagen errónea de lo que sucede en la actualidad.
“Somos un pueblo venezolano, que en 200 años de paz, nuestro país es el único que nunca ha tenido una guerra con nuestros vecinos”, afirmó el diplomático. En tanto, el embajador de Chile, Darío Payá, hizo un llamado a la paz y al diálogo “entre las partes” para resolver el conflicto en Venezuela.
A su turno, el representante de Bolivia, Diego Pary, reiteró su apoyo al Gobierno de Maduro y rechazó “toda aventura golpista”.
En similar dirección se orientó el embajador de Ecuador, Marco Albuja, que dijo que la Unión de Estados Suramericanos (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) no “tolerarán que grupos minoritarios o élites burlen las decisiones democráticas de los pueblos”.
Mientras esto ocurría en el recinto de la sede de la OEA en Washington, decenas de opositores venezolanos, convocados por la organización “Una voz para la democracia en Venezuela”, pidieron afuera a la organización que condene al Gobierno de Maduro.
También exigieron la convocatoria de elecciones en los próximos seis meses. La comunidad venezolana radicada en Estados Unidos también convocó para hoy otra manifestación de similares características frente a la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York.