Cientos de policías británicos desaprobaron el examen de gimnasia obligatorio, implementado por el gobierno para mejorar el estado físico de los agentes del orden.
Uno de cada 50 agentes que se sometieron a la prueba desde el otoño boreal desaprobaron, en tanto que el 67% de ellos eran mujeres.
Los exámenes de gimnasia para la Policía británica son obligatorios desde septiembre, aunque durante el primer año los agentes que desaprueben no serán penados.
Sin embargo, a partir de septiembre de 2014 aquellos agentes que no pa sen la prueba enfrentarán medidas disciplinarias. De los 27 departamentos policiales de Inglaterra y Gales, tras un total de 13 024 policías que rindieron el examen de gimnasia, 353 desaprobaron, un 2,7%. De ellos, 236 eran mujeres.
La prueba obligatoria anual de gimnasia fue ideada por el inspector general de la Policía británica, Tom Winsor, quien notó que los agentes se estaban volviendo cada vez más obesos, sedentarios y fuera de forma, dificultando sus tareas diarias, como perseguir a delincuentes.
El examen incluye una carrera de 15 metros, donde los participantes deben alcanzar la meta en pocos segundos, como también salto de vallas, pruebas de resistencia y de fuerza física.