El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, lanzó un llamamiento al mundo, ayer, 6 de febrero, en Sochi, para que se levante contra los ataques a los homosexuales, la víspera de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.
Al mismo tiempo, Estados Unidos alertó a las compañías aéreas locales y extranjeras que terroristas podrían tratar de introducir explosivos disimulados en tubos de pasta de dientes en los vuelos con destino a Rusia, donde se celebran los Juegos. Ban Ki-moon lanzó su llamado “contra los ataques a los gais” en una intervención en la sesión del Comité Olímpico Internacional (COI).
“Muchos deportistas profesionales gais y heterosexuales están contra los prejuicios. Debemos todos elevar nuestra voz contra los ataques a lesbianas, gays, bisexuales, transexuales o intersexuales”, afirmó en plena polémica por una ley rusa que castiga con multas y prisión la “propaganda” de la homosexualidad ante menores. La ley, promulgada en junio pasado por el presidente ruso, Vladimir Putin, suscitó vivas críticas, sobre todo en Occidente. El miércoles, la ONG de defensa LGBT (lesbianas, gais, bisexuales, transexuales) All Out organizó manifestaciones en 19 ciudades del mundo. Y ayer más de 200 escritores, entre ellos Salman Rushdie y Margaret Atwood, firmaron una carta abierta para denunciar las leyes rusas.