El papa Francisco (izq.) preside la procesión de antorchas Via Crucis durante el Viernes Santo frente al antiguo Coliseo en Roma, Italia, el 30 de marzo de 2018. (Papa, Roma, Italia) EFE
El papa Francisco inició este viernes 30 de marzo de 2018, el Vía Crucis en el Coliseo de Roma, en medio de una fuerte presencia policial por temor a atentados terroristas.
La policía italiana desplegó unos 10 000 efectivos para garantizar la seguridad en una de las ceremonias más solemnes del calendario católico luego de que trascendiera que grupos islamistas planeaban atentar en la capital italiana.
El Papa llegó al antiguo anfiteatro romano para presidir la escenificación de las 14 estaciones de las que, según los católicos, consistió el camino a la cruz de Jesucristo.
Entre los portadores de la cruz este año hay numerosos jóvenes, una familia oriunda de Siria y unas monjas de Iraq, que huyeron de la violencia de la milicia terrorista Estado Islámico.
El Sumo Pontífice, de 81 años, no participa en la procesión, pero sigue los hechos desde un podio, ubicado delante de una cruz gigante iluminada con velas.
Una cruz adornada con velas es vista junto al Coliseo antes de que el papa Francisco presida los ritos del Viernes Santo con la ceremonia tradicional del Via Crucis en el Coliseo, símbolo de la persecución de los primeros cristianos, en Roma, Italia, el viernes 30 de marzo de 2018. EFE
Al final de las dos horas de ceremonia, se espera que se dirija a la multitud con una bendición. La policía elevó las medidas de seguridad luego de varios arrestos de sospechosos de terrorismo.