Imagen referencial de São João do Araguaia, tomada de la cuenta de Twitter @luissassif
Un grupo de pistoleros torturó durante cerca de una hora a una decena de familias acampadas en la ribera de un río en el municipio de Sao Joao do Araguaia, en el estado brasileño de Pará (norte), según denunció este lunes 7 de mayo, la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT).
Las torturas ocurrieron en la noche del pasado viernes, cuando un grupo de encapuchados “fuertemente armados” con escopetas y pistolas llegó al
campamento de las familias, donde había 11 menores de entre 3 meses y 10 años de edad y, entre los adultos, una mujer embarazada de tres meses.
La organización, vinculada al Episcopado de la Iglesia católica, denunció en una nota que “los trabajadores fueron víctimas de una sesión de torturas” por
medio de “golpes con palos y machetes”, cuyas marcas “aparecen esparcidas por sus cuerpos”.
“Los pistoleros dispararon sus armas cerca del oído de dos bebés gemelos de tres meses de edad para aterrorizar a la madre. Dispararon en redes con menores dentro, además de derrumbar y pisotear a niños en el suelo”, apuntó
en el comunicado.
También denunció que una de las madres que estaba embarazada, que también fue pisoteada, sufrió una hemorragia y “ha podido ser víctima de un aborto”.
Después de cometer esas prácticas de tortura, los sospechosos prendieron fuego a las tiendas y estructuras donde las familias vivían con todo lo que había dentro y les obligaron a subirse a una camioneta.
Acto seguido, dejaron tiradas a estas familias en otro municipio situado a 30 kilómetros del local donde tenía el campamento original.
Estas familias “sin tierra” fueron desalojadas en enero pasado de un terreno propiedad de la compañía siderúrgica Sidenorte Marabá por orden de un juez brasileño.
Al no tener un lugar donde asentarse, el grupo decidió acampar en la ribera del río cerca del municipio So Joo do Araguaia, pero los pistoleros les han dado la orden “para que se vayan a Tocantins”, estado vecino con Pará, y no
vuelvan nunca más.
“No hay informaciones de que la Policía Civil investigue o haya responsabilizado a alguien por organizar esas milicias armadas en la región sureste de Pará”, denunció la comisión.
Brasil registró en el 2017 un total de 70 muertes en conflictos por la tierra, un número en un 15 % superior al de 2016 y el mayor en los últimos 14 años, según señaló la CPT en un informe divulgado el mes pasado.