Imagen de la cárcel de Saydnaya, tomada del portal BBC News
Una cárcel militar autorizada por las máximas autoridades sirias supervisó una “monstruosa campaña” de atrocidades secretas, incluyendo el ahorcamiento de 13 000 personas en cinco años, informó el lunes 6 de febrero de 2017, Amnistía Internacional (AI).
Los secretos ahorcamientos masivos ocurrieron en el marco de una “calculada campaña de ejecuciones extrajudiciales” impulsada por el gobierno del presidente sirio, Bashar al Assad, en la prisión de Saydnaya, cerca de Damasco, dijo la organización de derechos humanos. Los guardias de Saydnaya supervisaron semanalmente “en medio de la noche y en total secreto”, en ocasiones dos veces por semana, ahorcamientos de hasta 50 prisioneros por vez, muchos de ellos opositores al gobierno.
Hasta 13 000 prisioneros fueron ejecutados en la prisión entre 2011 a 2015, tras haber sido sentenciados por tribunales militares bajo confesiones forzosas, indicó el informe titulado “Matadero humano: Ahorcamientos masivos y exterminio en la prisión de Saydnaya”.
El informe documentó “repetidas torturas y privación sistemática de agua, medicamentos y cuidado médico”, además de afirmar que las prácticas en la prisión “califican como crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad”. Lynn Maalouf, vicedirectora de investigación de la oficina regional de AI enBeirut, dijo que las prácticas en Saydnaya estaban “apuntadas a destruir cualquier forma de disenso entre la población siria”. “Demandamos a las autoridades sirias el cese inmediato de las ejecuciones extrajudiciales, la tortura y el tratamiento inhumano en la prisión de Saydnaya y en las otras cárceles a lo largo de Siria”, dijo Maalouf. “Rusia e Irán, los aliados más cercanos del gobierno, deben presionan para terminar con estas prácticas de detención asesinas”, dijo. Las próximas negociaciones de paz en Ginebra, Suiza, “no pueden ignorar estos descubrimientos”.