Moscú, Ansa
El periodista Kostantin Popov, de 47 años, murió hoy en un hospital de Tomsk, en Siberia, tras entrar en estado de come luego de haber sido brutalmente golpeado por un policía el 4 de enero pasado.
Ese día había sido detenido y conducido a un centro de reunión de personas en estado de fuerte ebriedad. Algunas horas después fue llevado a su casa, pero luego fue hospitalizado en gravísimas condiciones por lesiones en los órganos internos.
El 15 de enero pasado fue detenido un policía de 26 años, Alexei Mitaiev, acusado de haber golpeado al periodista. Explicó su acción por un estado de estrés “relacionado con sus tres hijos pequeños” que tuvo con dos mujeres, refirió el vicejefe del comité de investigación regional, Andrei Gusiev.
Después del caso renunciaron dos dirigentes de policía, el vicejefe propuesto en el centro para ebrios -cerrado de inmediato- y el responsable organizativo de las unidades de recolección de personas en estado de ebriedad.
La Unión local de periodistas definió como “horrenda e injusta la muerte de Popov, que conmocinó a todos sus colegas”. Desde hace meses los policías rusos están en el ojo de la tormenta por casos de homicidios, corrupción y abuso de poder.