En horas pico, los redondeles del Distrito Metropolitano de Quito se vuelven un reto para el conductor. Congestión e irrespeto a las normas de tránsito son comunes incluso en sus alrededores.
Algunos vehículos demoran hasta 10 minutos en cruzar, por ejemplo, el redondel de la Plaza Artigas, en el norte de la ciudad. Allí, el principal problema es la cantidad de vehículos que lo atraviesan. La avenida Colón, la Coruña y la 12 de octubre son vías de alto tráfico vehicular. Los conductores lanzan los autos para poder tomar el distribuidor de tráfico.
El redondel ubicado junto al coliseo Rumiñahui presenta un riesgo para los peatones al momento de cruzar las calles. Las personas deben competir con los vehículos.
En el redondel de la avenida Naciones Unidas y 10 de agosto, la realidad es similar. El alto flujo vehicular y la existencia de semáforos produce atascos. Los vehículos que son detenidos por la luz roja bloquean el paso hacia una de las salidas de la rotonda.
El redondel de la Villaflora presenta una movilidad fluida para los automotores, sin embargo, cuando hay carga vehicular fuerte en las avenidas Maldonado y Rodrigo de Chávez, es un dolor de cabeza para los conductores.