Imagen del 16 de diciembre de 2015 que muestra al expresidente egipcio, Mohamed Morsi, derrocado por el Ejército en un golpe de Estado no sangriento en 2013, y prisionero desde entonces por cargos de espionaje en El Cairo (Egipto). Foto: EFE
El cuerpo del expresidente egipcio Mohamed Mursi, quien falleció súbitamente el lunes, fue sepultado este martes 18 de junio del 2019 en Medinat Nasr, un barrio al Este de El Cairo, aseguró uno de los sus abogados.
“Fue sepultado en Medinat Nasr (…) en presencia de su familia. Las oraciones fúnebres fueron en el hospital de la prisión de Tora”, donde Mursi había sido declarado muerto en la víspera, dijo su abogado Abdelmoneim Abdel Maksoud.
Mursi, miembro de los Hermanos Musulmanes, se convirtió en 2012 en el primer presidente egipcio electo democráticamente, aunque fue derribado por un golpe militar en 2013, y desde entonces era mantenido en prisión.
El lunes, Mursi se había presentado para una audiencia en un tribunal de El Cairo, aunque seguidamente se desplomó. El expresidente llegó a ser trasladado a un hospital pero fue declarado muerto.
La red estatal de televisión egipcia aseguró que la muerte se produjo por un paro cardíaco.
El Partido de la Libertad y la Justicia, brazo político de los Hermanos Musulmanes, también acusó a las autoridades egipcias de “ lento asesinato ” , denunciando las “malas condiciones” de detención de Mursi.
Desde su destitución, Mursi fue condenado en total a 45 años de prisión en dos casos: incitación a la violencia contra manifestantes a fines de 2012 y espionaje a favor de Catar.
Durante sus juicios, aparecía en el banquillo de los acusados detrás de vidrios que aislaban el sonido para evitar sus diatribas, lo que no le impedía presentarse, con un aire marcial a veces un poco forzado, como el presidente víctima de un “ golpe de Estado ” militar.