El burkini es el bañador que usan las musulmanas que cubre el cuerpo y el cabello. Foto: AFP
El primer ministro de Francia, Manuel Valls, se pronunció en una entrevista publicada el 15 de agosto en contra de que se prohíba por una ley nacional el burkini, el bañador de las musulmanas que cubre todo el cuerpo y el cabello, excepto la cara, las manos y los pies.
Aun así, en la entrevista concedida al periódico regional “La Provence”, Valls muestra comprensión por la decisión de los alcaldes de Cannes y otros municipios de prohibir el uso del burkini en sus playas.
En Cannes, una musulmana que se baño con un burkini se enfrenta a una multa de 38 euros (USD 43). Los burkinis no son una nueva moda, afirmó el primer ministro galo. “Es la traducción de un proyecto político, de una anti-sociedad, que se basa sobre todo en la sumisión de la mujer”.
Valls recordó que Francia introdujo en 2004 la norma de tolerancia cero para símboles religiosos llamativos y escuelas francesas y la prohibición del burka vigente desde hace cinco años en el país.
El jefe de Gobierno francés anunció una nueva iniciativa para asegurar que la ley que prohíbe el burka se aplique efectivamente en la práctica.
En la isla de Córcega se produjeron el pasado fin de semana enfrentamientos, que dejaron cinco heridos, entre familias de inmigrantes y habitantes del pueblo de Sisco después de que una o varias mujeres musulmanas se bañaran con burkini. A raíz del incidente, el alcalde de Sisco también prohibió el uso del burkini en las playas.