Rueda de prensa del ministro Vinicio Alvarado en Jaramijó. Foto: Francisco Flores / El Comercio
El ministro de Trabajo, Leonardo Berrezueta, barajó la mañana de este miércoles 27 de abril las opciones que el Gobierno ofrecerá a las empresas afectadas por el terremoto del pasado 16 de abril para normar la relación con sus empleados hasta que logren reactivar sus negocios.
Entre las alternativas está la suspensión temporal de la relación patronal por hasta tres meses, avalada por un inspector del trabajo, y con la garantía de que luego de superada la situación crítica pueda retomarse la relación laboral. Esta opción debe ser producto de un acuerdo entre las partes.
“El objetivo de las medidas es preservar el empleo”, subrayó el Ministro, que participó en una sesión con las autoridades del frente económico, productivo y social en el Puerto Pesquero Artesanal de Jaramijó, en Manabí.
En la reunión con autoridades seccionales y empresarios el Ministerio Coordinador de Producción, Empleo y Competitividad se habló de un paquete de medidas económicas y productivas que permita recuperar la actividad comercial, empresarial y de trabajo en las zonas de desastre.
Las empresas afectadas también podrán aplicar el artículo 60 del Código de Trabajo que norma el pago del salario o la remuneración del trabajador durante un tiempo de paralización o inactividad. Luego el empleado debe retribuir o recuperar lo devengado en jornadas laborales extendidas por hasta tres horas incluido los sábados.
Una tercera alternativa es aplicar la jornada reducida aprobada recientemente por la Asamblea Nacional, que dispone la reducción de hasta el 25% de la jornada con la reducción del 25% del salario del trabajador por caso fortuito y un acuerdo previo entre las partes.
Las medidas, que incluyen la opción del teletrabajo para que los trabajadores puedan laboral desde sus casas, entrarán en vigencia desde la tarde de este mismo miércoles cuando el Ministerio tiene previsto elevar las alternativas en un acuerdo ministerial, informo Berrezueta.
El acuerdo, que es afinado en la reunión de Jaramijó, contiene además consideraciones sobre el sector público tendientes también a precautelar el empleo, en el caso de contratos ocasionales, y normar las condiciones de trabajos de empleados públicos que llegaron a trabajar a la zona de desastre.