Cierto es, cholitos, que somos
un poquito pobretones
y no tenemos a mano
eso que llaman millones.
Nos es difícil, caramba,
soñar en un milloncito
pues no tuvimos la suerte
de un tal Noboa Alvarito.
Pero algo, ras, planearemos
con paciencia y corazón
si un maldito juez ordena
que paguemos un millón.
Nos asustaremos, claro,
y pegaremos un brinco
si el juez se vende y ordena
que paguemos, ajo, ¡cinco!
Y si el juez se pone bruto
y nos dice “paguen diez”
les prometemos que, claro,
apelaremos’talvez.
Dólares sí’Diez millones
pagaremos, mama mía,
si heredamos todo el IEES
o el gran Fabricio nos fía’
Ojalá que una rebaja
de diez millones -Dios quiera-
nos consiga, calladito,
el doctor Alexis Mera.
Si todo falla y pagamos
los diez millones de cocos
quiere decir que toditos
nos volvimos, chuta, locos’!