Así lucía ayer, viernes 31 de marzo de 2017, la calle Juan Montalvo, en el centro de Milagro, que se inundó ayer, luego de tres días de lluvias. Foto: Mario Faustos/EL COMERCIO
Guayas y Loja fueron afectadas ayer, viernes 31 de marzo de 2017, por los desbordamientos de ríos, según los reportes de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR).
También hubo problemas por las intensas lluvias en las poblaciones rurales de Bolívar y Cotopaxi; aunque no se presentaron anegaciones.
La inundación más grave se produjo en Milagro (Guayas). Las lluvias de los últimos tres días inundaron el cantón, desde sus recintos hasta el centro de la ciudad, lo que obligó a que el Municipio decretara el estado de emergencia.
La situación fue considerada crítica, porque hay sectores rurales donde los niveles de agua alcanzaron 1,5 metros, según reportó el Cabildo.
Marjorie Bernal sacaba los enseres de su casa, ubicada en el sector del kilómetro 7 de la vía el Deseo Milagro, debido a la inundación que la sorprendió la madrugada de ayer. La mujer, ayudada por sus vecinos, empujaba una improvisada balsa y sobre ella un saco de ropa y los libros de la escuela de sus nietos.
La mujer cuenta que representantes del sector solicitaron hace dos meses al Municipio la limpieza de un canal de drenaje. Eso no se habría cumplido y sería la causa de la inundación. Ella vive allí hace 30 años y dice que es la segunda vez que ve una inundación.
Unas 15 familias viven allí y, al igual que Bernal, sacaban sus pertenencias para evitar que se dañaran. Los adultos rescataban sus objetos y un grupo de niños jugaba en la gran piscina que se formó.
Más adelante, en el ingreso del recinto El Cambio, cuatro camionetas esperaban a los moradores del sector para ayudarles a trasladar sus pertenencias. El lugar, donde habitan cerca de 50 familias, se vio afectado por las lluvias y la crecida del río Los Monos.
Fabián Bonilla usó una llanta vieja para salvar parte de sus pertenencias. Cuando caminaba desde el recinto hasta la vía principal que lleva a Milagro, el agua le llegaba a la altura del pecho. “Hemos pedido ayuda y no tenemos respuesta”.
Ante esos reclamos, la alcaldesa de la ciudad, Denisse Robles, manifestó que realizaban trabajos en conjunto con la SGR y el Cuerpo de Bomberos, para auxiliar a las familias que resultaron afectadas.
Hasta la tarde de ayer se había habilitado cuatro albergues, en donde se refugiaron 137 personas. Según Robles, los damnificados son asistidos con baterías sanitarias, comida y agua; por lo que solicitó la colaboración y donaciones de los municipios vecinos.
En el centro de la ciudad, el tráfico se volvió caótico debido a la acumulación de agua en la avenida Los Chirijos y la calle 17 de Septiembre, arterias principales de la urbe. El agua cubría totalmente las aceras y los parterres, e ingresaba a los domicilios.
Los locales ubicados en las calles Guayaquil, Chile y todo el casco comercial permanecieron cerrados debido a la inundación. Los agentes de la Comisión del Tránsito del Ecuador solicitaban que los vehículos circularan lentamente, para evitar accidentes.
Enrique Ponce, director de Gestión de Riesgo en Guayas, explicó que para esta inundación coincidieron varios factores. Al desbordamiento del río Milagro y la marea alta que se registró en los últimos días, se sumó la intensidad de las precipitaciones.
“La gran cantidad de agua que cayó generó una sobresaturación en los suelos y Milagro, al estar rodeada de ríos, es propensa a este tipo de fenómenos”.
Según los datos de la Municipalidad, la madrugada de ayer cayeron cerca de 104,1 milímetros de agua por metro cuadrado, cuando se esperaban 60 milímetros. “Saturó el sistema de alcantarillado y el sistema de compuertas que habíamos colocado en el río Milagro para evitar las inundaciones”, dijo la alcaldesa Robles.
Ponce agregó que el sistema de alcantarillado colapsó debido a la marea alta, lo que hizo que las tuberías en lugar de drenar la ciudad permitieran el ingreso del agua en un “cambio de corriente”.
Con la emergencia se espera agilitar la asignación de recursos para atender a los damnificados y reparar los daños.
Estas fuertes lluvias han dejado 21 fallecidos hasta el momento, según el reporte de Gestión de Riesgos. Hasta el jueves hubo 18 muertos.
Los daños en Bolívar y Cotopaxi
La Secretaría de Riesgos informó que las intensas lluvias de las últimas horas provocaron el deslizamiento de tierra y piedras en las vías que conectan las zonas andinas con el subtrópico de la provincia de Cotopaxi en el kilómetro 46 en la vía Latacunga – La Maná. Los obreros y la maquinaria del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) retiraron la tierra de la calzada.
Los operadores del ECU 911 Babahoyo informaron que la carretera que une el cantón Guaranda con la parroquia Balzapamba y posteriormente a Montalvo, perteneciente a la provincia de Los Ríos, se encuentra parcialmente habilitada.
Según Rubén Chérrez, responsable de la SGR de Bolívar, en esta zona es común los deslaves por lo que se ubicó un campamento permanente para habilitar la carretera.
La vía que une el cantón Echeandía (Bolívar) con su vecino Ventanas (Los Ríos) colapsó. “El agua que desciende desde las quebradas con ramas y piedras provocó que las alcantarillas se taponaran. Las dos provincias quedaron incomunicadas. Estamos evaluando los daños”, indicó.