El inmigrante mexicano César Vargas inicia último paso del proceso que le llevará a convertirse en el primer indocumentado que podrá ejercer como abogado en Nueva York, tras una histórica victoria en los tribunales.
“Ha sido un momento muy grande, realizado por mucha gente. Esta victoria pertenece a toda nuestra comunidad”, dijo a Efe Vargas, quien se encontraba en Iowa la pasada semana cuando la Corte estatal de Apelaciones falló a su favor y regresó a Nueva York.
“Fue un ‘shock’, no lo creía, pero después llamé a mi madre y le dije ‘lo hicimos, ganamos una lucha muy fuerte'”, recordó Vargas, que llegó a Nueva York con su madre cuando tenía cinco años, y que ahora espera abrir su propia oficina en Nueva York y otros estados así como en México para continuar ayudando a los inmigrantes.
Vargas, de 31 años, presentó ayer, 10 de junio del 2015, ante el tribunal un documento que certifica que ha realizado 50 horas de trabajo ‘pro bono’ (asistencia jurídica gratis o de bajo costo), con lo que completaría el último paso antes de jurar como abogado y unirse así a otros indocumentados en California y Florida que lo han logrado.
“Se está tratando de resolver esto muy rápido para que poder hacer pronto la ceremonia de jura”, indicó este inmigrante de Puebla, quien, tras graduarse en derecho por la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY), y de beneficiarse del Programa de Acción Diferida (DACA), solicitó su licencia de abogado en 2012.
Sin embargo, pese a beneficiarse del DACA, que otorga permiso de trabajo por dos años a quienes entraron al país siendo menores, no podía ejercer su profesión al no tener el visto bueno de un comité por su estatus legal, lo que ha cambiado con el fallo de la corte.
Una vez certificadas sus horas de trabajo pro bono le comunicarán la fecha para la jura. “Lo más difícil ya pasó”, afirmó Vargas, que estuvo representado por el abogado José Pérez, de LatinoJustice PRLDEF (Puerto Rican Legal Defense and Educational Fund).
Vargas se unió a la lucha de otros ‘dreamers’ por una reforma migratoria, a la que se ha incorporado recientemente que puedan ingresar a las Fuerzas Armadas, un reclamo que llevaron ante el Congreso el pasado mayo y que continuará, según dijo a Efe.
Vargas espera poder cumplir además su deseo de volver a Puebla, donde no ha vuelto en 25 años, desde que llegó a Nueva York con su familia, cuando obtenga un permiso de viaje, que le permita salir del país y regresar sin problemas.