Desde marzo de 1990, el programa Hoy no circula se volvió obligatorio para todos los autos privados del Distrito Federal de México (DF).
Una mañana de 1989 la capital mexicana amaneció llena de palomas muertas. Eso debido a la alta contaminación ambiental producida, sobre todo, por vehículos.
Un año después, la restricción se aplicó también al transporte público. Los residentes del DF pueden circular en sus carros particulares mediante un adhesivo de distintos colores que se pega al cristal del auto y un certificado que tiene números, desde el 00 hasta el 2. Los colores indican qué día de la semana el auto no puede circular y los números muestran el tipo de restricción.
20 Años
lleva la restricción vehicular en el DF. Según un estudio, los resultados son pobres.
Por ejemplo, Isabel Naal, residente estadounidense que vivió cinco años en el DF, cuenta que su auto tenía restricción 1 porque era un modelo posterior al año 1991. El nivel de emisión de su carro no superaba el 2% en volumen de monóxido de carbono.
Por lo que Naal podía circular seis días a la semana y no siete. Quienes tienen certificado 0 y 00 no pueden hacerlo dos días a la semana, pues son modelos antiguos que emanan más cantidades de monóxido.
Según datos de la Embajada de México, los estudios realizados por la Secretaría de Medio Ambiente del Distrito Federal muestran que por medio de este sistema se han retirado de circulación 320 000 autos diarios.
En el DF circulan 4 millones de carros diarios y el parque automotor se incrementa en 200 000 vehículos anuales. Así que la reducción del uso del auto con la restricción es menos del 20%.
A pesar de que la medida se tomó para reducir el impacto ambiental, el sistema, según Naal, fue poco aceptado. Los ciudadanos matricularon sus autos en otros estados. El Gobierno optó por restringir también el ingreso de los autos extranjeros.