Redacción Política
Una vez que la Superintendencia de Telecomunicaciones (Suptel) emitió la suspensión de tres días en contra de la estación Teleamazonas, los integrantes del movimiento político Justicia y Libertad salieron a protestar en las calles.
El líder de dicha agrupación, Patricio Haro, organizó ayer un plantón en las afueras del edificio de la Suptel para protestar en contra de la sanción. Con un megáfono en su mano, el activista arengaba a los conductores para que piten las bocinas de sus autos en señal de protesta y rechazo.
“Esa decisión del déspota del Palacio de Carondelet destruyó los acuerdos que se lograron en la Asamblea Nacional. Eso es totalitarismo”, manifestó Haro.
Santiago Guarderas, decano de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Católica, también rechazó la medida de la Suptel. “Vamos a demostrarle al Gobierno que las políticas que emplea son nefastas”, indicó. Con banderas y cánticos, alrededor de 40 personas protestaron en contra de la Suptel y el cierre de Teleamazonas.
Por la tarde, otro plantón de manifestantes tenía previsto instalarse en la sede de la estación televisiva, ubicada en el norte de Quito. Desde las 17:00, decenas de personas acudieron al lugar para gritar a favor de la libertad de expresión. Haro aseveró que en los próximos días se seguirán realizando plantones en las afueras de Teleamazonas y la Suptel.
Por otra parte, los miembros del colectivo DiabloUma llegaron a la sede de la Suptel, a las 17:00, para demostrar su apoyo al cierre de Teleamazonas. “Es necesario saber que somos muchos los que hemos sido históricamente agredidos y manipulados por este medio de comunicación corrupto y que por tanto exigimos su cierre definitivo”, precisó el comunicado de dicha agrupación.
Como medida de apoyo a la resolución, los integrantes de la agrupación llevaron pancartas. Para los líderes de dicha agrupación, “la sanción es mínima para lo que realmente se merecen”.