La ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) negó este jueves, 26 de octubre, ante la Justicia haber encubierto a un grupo de iraníes acusados de, presuntamente, planificar el atentado terrorista a la mutual judía AMIA cometido en 1994 en Buenos Aires, dijeron fuentes judiciales.
“La causa es un gran disparate jurídico”, aseguró Kirchner al salir de los tribunales de la capital argentina, donde citada a declarar en el caso de presunto encubrimiento del ataque. La ex mandataria estuvo acompañada por un grupo de dirigentes y militantes de su partido. Kirchner hizo su declaración por medio de un escrito.
A la salida de la vista, reiteró a la prensa que es víctima de una “persecución judicial” y que el Gobierno del presidente Mauricio Macri “absolutamente está detrás de todo esto”.
Según Kirchner, senadora electa en los comicios de medio término efectuados el domingo pasado (22 de octubre) en el país,el objetivo de esa”persecución judicial” es “atemorizar a los dirigentes de la oposición” y hacerlos “callar” frente a las próximas medidas económicas “de ajuste”, dijo,que podría tomar Macri en poco tiempo.
Kirchner pronunció un corto discurso y no respondió las consultas de la prensa, algunas de ellas relacionadas con la detención este miércoles de quien fue su ministro de Planificación Federal en los ocho años de Gobierno, Julio De Vido, acusado de una presunta maniobra de desvío de fondos públicos.
La ex jefa de Estado fue citada a declarar hoy por el juez federal Claudio Bonadío, a cargo de una causa que inició en enero de 2015 el entonces fiscal especial del caso AMIA Alberto Nisman, quiencuatro días después de hacerlo apareció muerto en su departamento de Buenos Aires con un disparo en la cabeza.
Bonadío intenta dilucidar si Kirchner, junto a su entonces canciller Héctor Timerman y otros 13 ex funcionarios, legisladores y colaboradores buscó, supuestamente, dotar de impunidad a un grupo de iraníes sospechosos de atentar contra la AMIA. Según Nisman y el actual fiscal del caso, Gerardo Pollicita, ése fue el objetivo del Memorándum de Entendimiento que en 2013 firmaron los gobiernos de Argentina, a cargo de Kirchner, e Irán en Etiopía.
El acuerdo nunca entró en vigencia. En el escrito que le presentó al juez, Kirchner sostuvo que la “causa ya fue cerrada una vez por inexistencia de delito” y repitió que el Memorándum tuvo como único fin “destrabar el conflicto con Irán y que el juez argentino (Rodolfo Canicoba Corral) pudiese tomar las indagatorias” a los sospechosos iraníes. “Se buscó una solución diplomática a través de la negociación internacional”, agregó.
En ese sentido, Kirchner indicó que como el Memorándum “nunca entró en vigencia”, entonces “nunca (se) pudo producir” un delito.
La ex presidenta dedicó parte de su declaración escrita a criticar al juez Bonadío, algo que ya había hecho días atrás cuando el magistrado la citó a declarar en el caso. Kirchner cuestionó a Bonadío “por haber sido parte del encubrimiento al atentado a la AMIA como parte del Gobierno de (el entonces presidente) Carlos Menem“, al frente del país entre 1989 y 1999.
Además, recordó que el propio Nisman había acusado al juez de, supuestamente,promover una maniobra para apartarlo del caso AMIA y de, inclusive, “haber planificado situaciones de riesgo físico” contra el fiscal y su familia.
“Doctor Bonadío, de usted no espero Justicia. Pero confío plenamente que cuando en la Argentina se restituya el Estado de Derecho, tan dramáticamente afectado hoy por la espuria y desvergonzada relación entre el Poder Político y el Poder Judicial, la Justicia que reclamo finalmente se proveerá”, finalizó Kirchner.