La organización Transparencia Internacional (TI) nombró a sus nuevos dirigentes en Berlín. Foto: AFP
La corrupción estructural en América Latina es también un problema cultural que debe ser combatido con educación y prevención, señaló hoy el peruano José Ugaz en su primer día como nuevo presidente de la organización Transparencia Internacional (TI).
“Estamos acostrumbrándonos a vivir con eso, a creer que es normal. Hay una cuestión cultural que necesitamos combatir”, explicó el jurista de 55 años en un diálogo con los medios en la central del organismo anticorrupción en Berlín. “Los ciudadanos se están volviendo tan tolerantes a la corrupción que parece que la impunidad es la regla. Eso implica trabajar en educación y en prevención. Es algo que veremos a corto plazo”, señaló sobre los retos en su nuevo cargo.
Ugaz ganó prestigio internacional al impulsar diversas causas sobre corrupción a gran escala como procurador ad-hoc del Perú, incluyendo el juicio al expresidente Alberto Fujimori y al ex jefe de inteligencia nacional del país Vladimiro Montesinos.
El experto consideró que ese caso marcó un cambio cualitativo en el tipo de corrupción que sacude Latinoamérica. “Se pasó de una corrupción muy extendida con funcionarios públicos individuales recibiendo dinero a nuevas estructuras de redes criminales”, analizó.
“Creo que lo de Fujimori lo refleja muy bien. Ahora algunas voces dicen que tenemos lo mismo en la Argentina de los Kirchner o en la Venezuela de Maduro“, añadió sobre los presidentes Cristina Fernández de Kirchner y Nicolás Maduro.
“Hay una corrupción estructural. Es diferente y tenemos que afrontarla de modo diferente”. Funcionario de la unidad anticorrupción del Banco Mundial entre 2004 y 2006 y docente de derecho penal en la Universidad Católica del Perú desde 1986, Ugaz estaba vinculado a TI desde 2002 e integraba la junta directiva desde 2008.
La asamblea del organismo eligió la noche del domingo, 19 de octubre, también como vicepresidenta a la rusa Elena Panfilova, presente en el diálogo de hoy con los periodistas junto a Ugaz y al director ejecutivo de TI, el sudafricano Cobus de Swardt.