El gobernador tsáchila Javier Aguavil asistió a votar ayer, ataviado con las ropas típicas de su etnia. En Santo Domingo todo fluyó con normalidad. Foto: Juan Carlos Pérez para EL COMERCIO
La calma y el orden marcaron la jornada electoral del domingo 2 de abril, en todo el país.
En Santo Domingo de los Tsáchilas, dos personas recibieron citaciones por proselitismo político. “Conducían vehículos con propaganda política”, aseguró Fabián Sotomayor, del Consejo Nacional Electoral (CNE). Esa fue la única novedad en dicha provincia.
En Azuay, los representantes de Alianza País y de Creo confirmaron que acreditaron más de 2 000 delegados cada uno, que se distribuyeron en los 210 recintos electorales de los 15 cantones de la provincia. Todo se desarrolló con normalidad.
Al igual que en Ibarra, donde la única novedad se dio un día antes de la elección, cuando se denunció la supuesta movilización de papeletas en un auto particular. La Policía detuvo en Ibarra a los dos responsables. Sin embargo, el CNE informó que no se trataba de material electoral oficial, sino de papeletas para levantar información con fines estadísticos.
En Esmeraldas, una de las molestias fue el intenso sol que obligó a mover algunas juntas receptora del voto hacia la parte interior de las aulas de planteles educativos. La otra fue la seguridad que se ubicó en los alrededores de la unidad de transmisión de datos del CNE, que produjo el cierre de vías.
Al final de la jornada, en Ambato, los simpatizantes de Creo se apostaron en los exteriores del Centro de Procesamiento de Resultados (CPR), mientras unos 100 policías protegían el edificio.
En los recintos electorales de Portoviejo la asistencia fue masiva. Al final de la jornada, simpatizantes de ambos grupos festejaban. Bolívar Velasco / EL COMERCIO
En Manabí, la jornada finalizó con una concentración de simpatizantes de Creo y de Alianza País. A las 17:30, los simpatizantes de estas organizaciones se autoconvocaron en los exteriores de la Universidad Técnica de Manabí, en Portoviejo. La Policía dividió los dos frentes con vallas y carros antimotines.
En Latacunga, al final de la tarde, la Policía también colocó cercos metálicos para evitar que los simpatizantes de ambos movimientos políticos se encontraran durante sus respectivos festejos.
En Riobamba, en los exteriores del CNE, centenares de militantes de Creo esperaron los resultados oficiales. Entre tanto, los militantes de Alianza País permanecieron en la sede de su movimiento.
En Ipiales, el Consulado de Ecuador recibió los votos de los ecuatorianos residentes en esa ciudad colombiana. Francisco Espinoza para EL COMERCIO