Jaime Nebot y Rafael Correa se turnaron para colocar las ofrendas florales en honor a Guayaquil

Plaza de Centenario se realizó la ofrenda floral por el presidente Rafael Correa. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO

Plaza de Centenario se realizó la ofrenda floral por el presidente Rafael Correa. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO

A diferencia de ayer, cuando coincidieron y se saludaron después de ocho años de discrepancias, durante la inauguración del remodelado edificio de la Dirección Regional 1 de la Contraloría General del Estado en Guayaquil, la mañana de este viernes 9 de octubre el alcalde Jaime Nebot y el presidente Rafael Correa mantuvieron sus agendas programadas y por separado.

El primer punto en esa agenda, dentro de las actividades por los 195 años de independencia de la urbe porteña, fue la tradicional colocación de la ofrenda floral. Aunque el Municipio había anunciado hacerlo a las 08:30, las autoridades del Gobierno fueron las primeras en realizar este acto cívico.

A las 09:00 sonaron los acordes de una banda de guerra junto a la Columna de los Próceres, en la Plaza Centenario, ubicada en el centro de la ciudad. Varios arreglos florales, de distintas entidades del Estado y en con los colores de la tricolor, adornaron la base del monumento en honor a los precursores de la independencia de 1820.

El presidente Rafael Correa lideró esta ceremonia y junto a él estuvieron la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira; y el ministro de Defensa, Fernando Cordero. También le acompañaron el ministro Coordinador de Seguridad, César Navas; el gobernador del Guayas, Julio César Quiñónez; y varios oficiales de las Fuerzas Armadas.

Plaza de Centenario se realizó la ofrenda floral por el presidente Rafael Correa. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO

Las autoridades caminaron por una alfombra roja colocada en el lugar. Un grupo de Granaderos de Tarqui los escoltó.

Cuando estaban a punto de salir, el presidente rompió el protocolo para regresar al sitio de la ofrenda y posar nuevamente para las cámaras. En ese momento, con sus manos, hizo el gesto de 2-0, por el histórico triunfo de la selección ecuatoriana de fútbol ante los argentinos, este jueves 8 de octubre.

Luego de la salida de Correa, unos 20 minutos después, fue el turno del alcalde porteño. Nebot llegó con un traje crema, camisa blanca y corbata celeste. Caminó junto a la vicealcaldesa, Doménica Tabacchi, para oficializar la colocación de un arreglo floral que formó la bandera celeste y blanco. La primera autoridad de la ciudad también fue acompañada por concejales y asambleístas del movimiento Madera de Guerrero.

A diferencia de Correa, quien abandonó la plaza en medio de un fuerte resguardo para trasladarse a la parada militar, que se desarrolla en la autopista Narcisa de Jesús, el alcalde Nebot se detuvo para hablar con la prensa de su cordial saludo con el mandatario y también del triunfo tricolor.

“No hay que confundir la cortesía y la valentía, porque uno tienen que ser civilizado. Eso no va a hacer que yo y él, seguramente, dejemos de pensar como pensamos y de actuar como actuamos”.

Y agregó que “al menos yo seguiré recibiendo con críticas lo que piense que hace daño a mi ciudad, a mi país y sobre todo a mi conciencia. Y seguiré comprobando lo que yo pienso que le haga bien, sin importar que venga de partidarios o de adversarios”.

Suplementos digitales