Según Jaime Nebot, el país atraviesa por una crisis de falta de dinero y una de las razones que mencionó fue el crecimiento en el pago de nómina de funcionarios estatales. Foto: Cortesía Municipio de Guayaquil
El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, aprovechó su conferencia en el encuentro sobre Empleo, Economía y Seguridad, que se desarrolló en Ambato, para criticar el accionar del Gobierno central en materia política. Nebot fue recibido con aplausos en el coliseo del colegio La Salle, de Ambato, ayer -25 de junio-.
El funcionario subió a la tarima para su charla, que se extendió por 30 minutos, en la que habló de temas como la unidad, el gasto público y las políticas de Estado.
Foto: Cortesía Municipio de Guayaquil
Según el funcionario porteño, el país atraviesa por una crisis de falta de dinero. Una de las razones que mencionó en su discurso fue el crecimiento en el pago de nómina de funcionarios estatales. “En el 2007 la nomina del Estado central valía USD 4 500 millones y ahora está en USD 9 500 millones. El dinero del pueblo se trasladó al Estado para pagar la farra fiscal”, mencionó un enérgico Nebot, entre los aplausos de los asistentes.
Ante esas palabras, los presentes empezaron a gritar consignas a favor de una posible candidatura presidencial del principal del Municipio guayaquileño. “¡Nebot presidente!”, era el canto generalizado. Él aclaro que sus palabras no estaban dirigidas a captar votos o a impulsar una candidatura presidencial para los comicios del 2017. Por eso pidió prudencia a los asistentes y continuó con su discurso.
Nebot mira desconsiderado pensar una carrera presidencial, cuando -según él- la política debería estar enfocada a buscar soluciones a largo plazo y a buscar el bienestar colectivo de la sociedad. A pesar de eso, el burgomaestre apuntó: “Si el pueblo ecuatoriano quiere conducir el Estado, en esa lucha está Jaime Nebot. No me importa si es dentro o fuera del Gobierno”, dijo.
Reconoció que otra de las razones de la crisis fue la caída exponencial del precio del petróleo. Sin embargo, fustigó a los encargados del Gobierno por no haber tenido un plan emergente, con reservas y ahorros, que permita manejar la crisis.
En ese sentido criticó el nivel de endeudamiento del país, que calificó de “caro y agresivo” y que -desde su óptica- podría generar la ruina del país.
Recomendó, como única forma para solventar la crisis, una alianza con la empresa privada. Según él, eso podría atraer a la inversión extranjera y generaría mayores fuentes de ingreso y trabajo para los ciudadanos. Calificó al actual régimen como totalitario, alejado del concepto de democracia. “La Asamblea y la Corte Constitucional ahora son simples ministerios de este Gobierno. Eso no es democracia, no se puede tener un país sin libertad y el verdadero demócrata respeta las instituciones”, enfatizó.