Bagdad, Reuters
Iraq planea adelantar una segunda licitación de importantes contratos energéticos y daría otra oportunidad a las firmas extranjeras para que pujen por yacimientos que no fueron concedidos en la subasta de esta semana, dijo un portavoz del Ministerio de Petróleo el jueves.
La segunda licitación del país de acuerdos energéticos “se suponía que fuera a fin de año pero la hemos adelantado. Anunciaremos la nueva fecha. Podría ser en los próximos meses”, dijo Asim Jihad, portavoz de la cartera petrolera.
En la histórica licitación de esta semana fue otorgado sólo un campo a un grupo extranjero liderado por BP, una decepción para los que esperaban que la subasta ayudara a revivir el devastado sector petrolero y elevara la producción de Iraq, actualmente de unos 2,4 millones de barriles por día (bpd).
La subasta evidenció las profundas diferencias entre lo que el Gobierno iraquí está dispuesto a pagar y lo que las empresas foráneas esperan ganar por el desarrollo de los yacimientos, la mayoría de ellos en operación.
Jihad dijo que los campos petrolíferos que no fueron concedidos serían ofrecidos en otro proceso de licitación o sumados a la segunda ronda, y algunos podrían hasta ser desarrollados por la petrolera estatal, si es que logra ser reestructurada.
La segunda ronda de subastas es considerada incluso más lucrativa que la primera, debido a que los campos que serán ofertados aún no han sido desarrollados.
Jihad agregó que el Gobierno planea desarrollar dos grandes campos gasíferos, Akkas y Mansuriyah, luego de que ninguno fuera asignado a una firma extranjera en la licitación del martes. “Akkas y Mansuriyah serán desarrollados por la Compañía Nacional de Petróleo tras la aprobación de la nueva ley petrolera”, afirmó Jihad.
La creación de una nueva petrolera estatal depende de la aprobación en el parlamento de un largamente postergado proyecto de ley sobre hidrocarburos.
Esos proyectos han sido retrasados durante años por las diferencias entre el Gobierno central en Bagdad y la minoría kurda del norte del país. Hay pocas señales de éstas sean zanjadas pronto.