Londres, Reuters
Las muertes maternas en los países en desarrollo podrían disminuir un 70 por ciento y las de recién nacidos un 50 por ciento si se invierte el doble de dinero en planificación familiar y atención del embarazo, indicó el jueves Naciones Unidas.
Un informe respaldado por la ONU señaló que las inversiones en planificación familiar y control de natalidad mejorarían la efectividad de los gastos en el embarazo y la atención de los niños recién nacidos, lo que sugiere que apuntar a ambas cuestiones a la vez podría lograr resultados “drásticos”.
“Invertir en una serie de servicios básicos de salud, como la planificación familiar y la atención del parto de rutina, puede salvar a millones de mujeres y bebés”, dijo Sharon Camp, presidenta del Instituto Guttmacher, un grupo de expertos que estudia la salud reproductiva y que emitió el informe junto con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
“No es ciencia espacial. Estos son servicios en su mayoría simples que pueden brindarse sin costos a nivel local, complementados por la provisión de atención de urgencia cuando es necesaria”, expresó Camp. Los expertos estiman que más de medio millón de nuevas madres y 3,5 millones de bebés recién nacidos mueren cada año en los países en desarrollo, y aseguran que muchos de esos decesos son fácilmente prevenibles.
El reporte indicó que duplicar el gasto actual a 24 600 millones de dólares evitaría la muerte prematura de casi 400 000 mujeres y 1,6 millones de bebés, reduciría en más de dos tercios los embarazos no deseados y disminuiría un 75 por ciento la cantidad de abortos inseguros y sus complicaciones.
Un informe publicado en octubre señaló que los abortos inseguros causaban la muerte de unas 70 000 mujeres al año y producían mutilaciones en millones más. La comunidad internacional actualmente destina alrededor de 12 000 millones de dólares anuales a la planificación familiar y a programas de salud materna en las naciones en desarrollo, según el nuevo escrito.
Con todo, los estudios aún muestran que cerca de 215 millones de mujeres que quieren evitar un embarazo no acceden a una contracepción efectiva y que sólo la mitad de los 123 millones de madres que dan a luz anualmente recibe la atención prenatal, durante el parto y al recién nacido que requiere.
Thoraya Ahmed Obaid, directora ejecutiva del UNFPA, manifestó que duplicar la inversión y focalizarse tanto en el control de natalidad como en la atención médica produciría una situación indefectiblemente ventajosa.
“Sabemos lo que debemos hacer, sabemos cuánto costará y sabemos que la inversión necesaria es modesta en relación con los enormes beneficios que conlleva”, añadió la funcionaria.