Un grupo de 20 indígenas salió de la provincia de Imbabura con rumbo hacia Quito para defender la sede de la Conaie. Foto: Paul Rivas/El Comercio
Los miembros de la Federación Indígena y Campesina de Imbabura salieron de la plaza central de Otavalo, con rumbo a Cayambe, la tarde de este sábado, 3 de enero del 2015. El grupo, encabezado por Ayny Guamán, tiene previsto llegar el martes 6 de enero a Quito.
La idea es llegar a la casa de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, Conaie, en la avenida Granados y 6 de Diciembre, con el objetivo de evitar el desalojo, ordenado por las autoridades gubernamentales en diciembre pasado.
Un comunicado del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) advirtió a la organización indígena del fin del convenio del comodato gratuito del edificio que ha sido su sede desde el gobierno del presidente Rodrigo Borja. El plazo de 15 días laborables para desalojar la sede culmina el 6 de enero.
EL objetivo del Gobierno, según indicó el MIES es utilizar las instalaciones como casa de acogida para jóvenes que superan su adicción a las drogas y no tienen familia.
Guamán fue elegido como el chaski que lleva el mensaje desde la comunidad de San Clemente, del pueblo Karanki, hacia Quito. Alrededor de 20 personas acompañan al mensajero en la ruta, pero según Rocío Cachimuel, dirigente indígena de Imbabura, en cada comunidad se unirán más personas y luego otros grupos en Quito, entre el lunes y el martes.
La decisión de hacer esta caminata se tomó el pasado 23 de diciembre del 2014, cuando la Conaie convocó una Asamblea de Emergencia, para definir las acciones que se tomarían para evitar que se les quite la casa en donde funcionan sus oficinas en Quito. Guamán salió de su comunidad, ubicada en Ibarra, el 29 de diciembre y ha visitado comunidades indígenas de la provincia, llevando su mensaje.
Según Cachimuel, hay otros reclamos de los indígenas de Imbabura, como el cierre de instituciones educativas bilingües en comunidades indígenas, por contar con pocos alumnos. Además, reclaman no haber sido tomados en cuenta para la elaboración de la Ley de Aguas y otros cuerpos legales relacionados con la tenencia y organización de tierras en el país, que consideran su patrimonio.
Un bus de la Policía Nacional esperaba a los marchantes en el ingreso a la comunidad de González Suárez, hacia el sur del lago de San Pablo. Después, los uniformados avanzaron en el vehículo hacia El Cajas, para aguardar por la manifestación.
El grupo de indígenas tiene previsto llegar en la noche a Cayambe y descansar allí, para salir la mañana del domingo, 4 de enero, con rumbo hacia Guayllabamba, en donde se quedarán hasta el lunes. Después caminarán hasta Carcelén, punto de encuentro con otros grupos de manifestantes.