La casa parroquial del barrio San Marcos fue reconstruida. Foto: Galo Paguay / El Comercio
La casa restaurada de la parroquia San Marcos, en el centro de Quito, se reabre hoy, 6 de agosto de 2016, después de casi ocho meses de intervención por parte del Instituto Metropolitano de Patrimonio. Los moradores tienen listo el programa para recibir a los visitantes.
Desde las 15:00, los vecinos, en conjunto con la Casa Parroquial, organizan un desfile con bandas de paz de colegios, caras pintadas para los niños, música y danza.
Según el padre Tito Heredia, párroco, a las 17:00 iniciará el acto con el que la casa quedará nuevamente abierta al público. Para esto se prevé la visita de delegados del Municipio.
Solo por hoy, los visitantes podrán ver el Interior de toda la casa, incluso la residencia parroquial. Desde el lunes, la residencia del párroco que se ubica en el segundo piso, ya será de acceso limitado al público en general.
La casa, cuya construcción data de 1800 y es considerada como patrimonial, estaba seriamente afectada en su estructura, según el párroco. “El techo se nos venía abajo y las tablas estaban deterioradas. Ahora esta casa está habitable y se mantiene con la misma estructura de 1800”, dijo.
Fue construida con adobe y madera. Esa estructura se respetó. Incluso la madera de olivo de los ventales es la original. Según Heredia, solamente las que daban a las salidas fueron cambiadas porque estaban muy deterioradas.
Al ingreso de la casa hay dos salones. Uno se utilizará para las personas que se acercan a sacar fe de bautismo. En el otro salón se instalará, desde octubre, una tienda Museo de arte popular ecuatoriano. El párroco, además de sus actividades religiosas se dedica al arte plástico. Por eso pondrá especial énfasis en este tipo de actividades.
En las paredes del corredor del primer piso se instalaran obras de grabado y pintura. “Queremos democratizar el arte. Que la gente del barrio asista y mientras está en el lugar pueda observar obras a las que, generalmente, las personas del sector no tienen acceso”, dijo Heredia.
En el patio, tres aulas también fueron regeneradas. Allí se darán las clases de catecismo para los niños que se preparan para la primera comunión y confirmación. “En estas aulas se recibirá a cerca de 200 niños que se preparan para estas ceremonias” dijo Heredia.
La intervención incluyó la instalación de redes eléctricas internas, ya que, anteriormente, las conexiones se realizaban a partir del exterior. “Había cables al aire y pelados que representaban un riesgo”, contó Heredia.
Para mañana, domingo 7 de agosto de 2016, en la plaza se instalará una feria de artesanos y, al medio día, el Arzobispo de Quito, Fausto Travez, visitará la casa par